Frontera
El Táchira en Positivo | Ingeniería Mecánica al servicio de la Medicina
12 de agosto de 2019
Debido al aporte de esta investigación al sector salud, se otorgó una distinción honorífica a Leandro Morales y Jhon Alejandro Caro.
Todo el trabajo se realizó bajo un riguroso proceso de cálculo y selección de los elementos mecánicos.
Un valioso aporte desde la ingeniería para el sector salud, con una solución netamente mecánica, fue el resultado del proyecto especial de grado que presentaron los jóvenes rubienses Leandro Morales y Jhon Alejandro Caro.
Ambos cursaron la carrera de Ingeniería Mecánica en la Universidad Nacional Experimental del Táchira, y su investigación dio como resultado la creación de un dispositivo tipo grúa para el traslado de pacientes con discapacidad motriz en centros hospitalarios y terapéuticos.
Bajo la tutoría de la doctora Belkys Amador, estos dos emprendedores elaboraron el prototipo, que por sus características ofrece múltiples ventajas, entre las que se puede considerar como una alternativa para cuidar la salud, tanto del terapeuta como del paciente.
El dispositivo permite movilizar personas parapléjicas, tetrapléjicas y cuadripléjicas, y aunque existen equipos electrónicos con adaptadores neumáticos o hidráulicos, debido a su alto costo, pues deben importarse, ya que no se fabrican en el país, es muy difícil su adquisición.
Para poder llegar a la solución se revisaron diferentes mecanismos de levantamiento de carga y se utilizaron una serie de poleas que reducen esta, donde una sola persona puede movilizar al paciente con el uso de un cabrestante.
El dispositivo es móvil para un mejor desplazamiento; consta de una base donde se sujeta la persona que se requiere trasladar. Se hizo un dispositivo en madera a escala, que tiene la mitad del tamaño del equipo real.
El proyecto se diseñó en el Laboratorio de Prototipos, adscrito al Decanato de Investigación de la UNET, el cual apoyó para la obtención de los materiales para la elaboración del modelo a escala.
Solución y aporte
Primero se hizo una selección entre varias alternativas para elegir el diseño más adecuado, se aplicó una metodología y se analizaron diferentes dispositivos para conseguir finalmente la solución.
Se escogieron los materiales adecuados para su elaboración: Poleas, cabestrante, cables metálicos, rodamientos y una estructura principal, que es una tubería cuadrada hueca de acero, el aparejo factorial, que son el arreglo de poleas que reducen la carga, y los arneses para colocar al paciente.
Es importante destacar que se buscaron opciones que incluyan materiales fáciles de conseguir y a un costo reducido de fabricación.
Se trabajó en función de las normas estándares internacionales para prueba y ensayo, en este caso particular en la norma ISO 9999 2007, que habla sobre productos de apoyo para personas con discapacidad, y la norma 10535, de 2006, que se refiere a grúas para el traslado de personas con discapacidad e incluye requisitos y los métodos de ensayo.
De acuerdo con lo que rigen estas normas, se trabajó para un peso tope de 180 kilogramos, con un factor de seguridad de 1,5; es decir que pueda soportar 1,5 veces más la carga aplicada; se consideró la antropometría de los pacientes, para que estén cómodos durante su traslado. También se hizo un análisis de estabilidad.
Se elaboraron los planos, así como los manuales de construcción y operaciones detalladamente, para que en un futuro cercano se pueda fabricar este dispositivo a escala real y ponerlo al servicio de tantas personas que lo necesitan. (Norma Pérez)