Jonathan Maldonado
Las precipitaciones de las últimas horas mantienen en alerta a las autoridades de los municipios fronterizos Bolívar y Pedro María Ureña, frente a posibles emergencias que se puedan generar en las zonas de alto riesgo.
En horas de la noche de este lunes, funcionarios de los Bomberos de San Antonio del Táchira y Protección Civil (PC) realizaron, junto al alcalde William Gómez, un monitoreo en las quebradas Las Dantas y Seca, cuyas corrientes no registraron altos niveles.
«No se han registrado eventualidades aún», resaltó Gómez, al tiempo que indicó que Bomberos y PC de la jurisdicción están en constante inspección de las zonas que podrían resultar afectadas por los aguaceros.
Entretanto, en Ureña, funcionarios de PC efectuaron este martes, en horas de la mañana, un recorrido por el río Táchira, el cual presentaba una crecida moderada de su afluente.
Henry Zabala, director de PC en Ureña, conminó a los ciudadanos a evitar pasar los caminos verdes cuando el afluente se halla crecido. «Evitemos cualquier desgracia», destacó.
Falla de borde
La falla de borde que se viene registrando desde el mes de noviembre del año pasado en la vía principal San Antonio – Ureña, a causa de las precipitaciones, se agudizó en las últimas horas ante la crecida de la quebrada La Capacha.
Durante la mañana de este martes, otro pedazo de la vía cedió justo al frente del parque Santa Rosa de Lima, en la parroquia El Palotal, municipio Bolívar.
Vecinos temen que la vía colapse por completo y los deje incomunicados. En este sentido, hicieron un llamado a las autoridades competentes para que concentren sus esfuerzos en solventar la problemática.
Dejaron claro que el escenario viene presentándose desde hace ya varios meses en la zona y, frente a las últimas lluvias, se ha agudizado.