Frontera
«En Ureña el gas solo aparece en campaña electoral»

El exconcejal y dirigente de Acción Democrática (AD), Carlos Taborda, lamentó el gran desorden que persiste en el municipio fronterizo Pedro María Ureña en torno a la distribución del gas doméstico. Aseguró que el servicio solo aparece cuando hay campaña electoral.

Taborda recordó que años atrás, cuando existían las empresas privadas, la críticas por parte de las autoridades se basaban en las demoras o retrasos de apenas 20 días para ir al hogar a instalarla, como solía ser el servicio.

Ahora, Pdvsa Gas solo llega a las comunidades dos o tres veces al año, prosiguió al reiterar que «la única forma en la que aparece el gas, llenándose el municipio, es que hayan campañas electorales; de resto, el gas desaparece».

Criticó que los ciudadanos, además de las eternas dilaciones, se vean en la obligación de trasladar las bombonas o cilindros a un sitio en específico que no cuenta con las medidas de seguridad.

«Seguimos exigiendo que tanto la recolección como la entrega, sea casa a casa para evitar el alto riesgo que se presenta en los diversos sectores», enfatizó, al tiempo que refutó que el cobro siga siendo en pesos. «Debería ser en bolívares, pues hay muchos mecanismos como el Pago Móvil y la trasferencia».

Más organización

El exconcejal Taborda hizo un llamdo directo al gobernador del Táchira, Freddy Bernal, para que se organice todo lo concerniente a la distribución del gas, ya que actualmente «prestan un servicio muy malo».

«Si a Pdvsa le quedó grande la distribución en el municipio, entonces permítale a una empresa colombiana que ingrese a la jurisdicción para paliar la situación. Es mejor comprarle a una empresa del vecino país, que cuesta 40 – mil pesos, que ir a comprar una bombona de 18 libras en 80, 100 o 110 mil pesos», subrayó, para luego puntualizar que el único gas que sí aparece es el comercial.

También hizo referencia a los cortes eléctricos en la mañana y horarios del mediodía, los cuales trastocan las labores en los hogares que solo dependen de las cocinas eléctricas, ante la ausencia del gas en sus hogares.

Jonathan Maldonado