Desde este miércoles y hasta hoy jueves, los motocarga de la frontera seguían sin poder cruzar el puente internacional Simón Bolívar con la habitual mercancía que suelen pasar en sus motos.
Para muchos, ha significado un gran golpe para sus bolsillos, debido a que ese oficio informal se ha convertido en su sustento diario ante la escasez de empleo formal en la región andina y en especial en el eje San Antonio – Ureña.
Desde la reactivación del tramo binacional, el pasado 17 de febrero de 2023, el oficio de motocarga cobró vida y sustituyó a los carretilleros y carrucheros, empleos informales que nacieron a causa del cierre de frontera.
Se conoció que los intensos controles en frontera se deben a la visita de un funcionario del Seniat, que estaría haciendo varios cambios de personal en los puntos de control.
«Yo vine a La Parada a llevar dos bultos de alimento para animales, soy de Rubio, y me devolvieron en la aduana», manifestó un joven que aguardaba con su compra en La Parada.
Jonathan Maldonado