La confrontación armada se registró el pasado seis de abril. El cadáver de la joven de 18 años, fue reclamado por su progenitora el 17-A

Un grupo de aproximadamente 10 hombres quienes vestían de negro y portaban armas de largo y corto alcance, llegaron hasta la Autopista Internacional e iniciaron un ataque contra unas personas, a quienes señalaron de pertenecer a la banda criminal «El Tren de Aragua».

Una vez se inició el ataque contra quienes estaban en el separador de esta importante arteria vial que llega hasta el puente internacional Simón Bolívar y otras personas que se encontraban en dos residencias, los habitantes de esa zona vivieron momentos de pánico e incertidumbre.

En medio de la balacera resultó mortalmente herida una joven. Su cadáver fue hallado a las 6:00 de la mañana del miércoles 7 de abril.

En ese momento, miembros de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) adelantaron la inspección y el levantamiento del cuerpo que inicialmente quedó sin identificar.

Madre desconsolada

La mamá de Glairelis Andreina García Rico, como fue identificada la mujer de 18 años asesinada la noche del 6 de abril, en medio de un ataque a bala del Eln en La Parada, Villa del Rosario, aseguró que desde que supo que su hija vendría hacia territorio colombiano, presintió que algo malo le podría pasar.

“Le rogué que se quedara con nosotros. Yo sabía del peligro que iba a correr acá. Con sus hermanos y conmigo no estaba mal”, recordó la mujer, quien arribó ayer desde Maracay estado Aragua (Venezuela), para reclamar el cadáver de su ser querido.

Sin embargo, García omitió las recomendaciones y las súplicas de su mamá e insistió en arribar a La Parada con un amigo, con la intención de trabajar y conseguir dinero para ayudar a su familia, por lo que atravesó la frontera hace un mes.

Según explicó la mamá de la víctima, ella le dijo a través de mensajes en una red social que estaba trabajando como vendedora ambulante, vendiendo agua y jugo en La Parada y que todo marchaba bien.

Entre las ilusiones de Glairelis estaba reunir dinero y retornar a su país de origen para celebrarle el cumpleaños a uno de sus hermanos, que será el próximo 2 de mayo.

“Ella me dijo que regresaría con nosotros y que traería el dinero para comprar una torta y celebrarle al niño”, dijo la mamá.

No obstante, en esas conversaciones, la mamá continuaba teniendo un pálpito de que las cosas podrían salir mal, por lo que le insistió a su hija que regresara pronto.

“Yo le hacía todas las labores de la casa y poco a poco conseguía los alimentos. Siempre le dije que buscara trabajo allá, que acá (Colombia) no tenía nada que hacer”, sostuvo la doliente, mientras tramitaba la orden para reclamar el cadáver.

 

 El Heraldo / La Opinión