Desde el punto de control de Peracal, pasando por el peaje de San Antonio del Táchira, hasta arribar al puente internacional Simón Bolívar, la imagen que reina es la desolación.
Es el segundo día con este escenario tras las elecciones del domingo 28 de julio. Los negocios han abierto pero con un nulo registro en las ventas.
El tramo binacional que usualmente suele registrar más de 30 mil vehículos al día, ha presentado un panorama bastante despejado. El dinamismo es muy bajo.
El transporte público está escaso. Lo que más se ven son mototaxistas, taxistas y muy pocas busetas. Los Corta Distancia, de la ruta Cúcuta – San Antonio, viceversa, están laborando.
En las últimas horas, ciudadanos han protestado pacíficamente por el descontento que aseguran sentir por los resultados dados por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Los actos intimidatorios siguen por parte de motorizados armados y encapuchados. Continúan marcando casas.
Jonathan Maldonado