Los motocarga ya no se ven cruzar el puente internacional Simón Bolívar. Desde el pasado 15 de mayo, hasta la actualidad, este oficio está paralizado ante los cambios de personal que se ejecutaron en el Seniat.
Un aproximado de 200 motorizados se dedicaba a este oficio informal que nació luego de la reactivación para el paso de vehículos por el puente que une a San Antonio del Táchira con La Parada, el pasado 17 de febrero de 2023.
El grupo sustituyó, en cierta medida, a los carretilleros y carrucheros que reinaron en frontera durante los años de cierre de los pasos binacionales. De más de 1.000 carrretilleros, solo quedó un reducido grupo de 20. Ahora también se ve limitado ante los «rigurosos controles» en la aduana principal.
Felipe era el que surtía a las bodegas de la parroquia El Palotal con su motocicleta. Alternaba su oficio de mototaxista con el de motocarga. «Al día, hacía entre cuatro a cinco viajes, que cobraba entre 15 mil a 40 mil pesos, dependiendo de la cantidad de mercancía transportada», aseveró.
«La mayoría de motocarga son de San Antonio, pero también están los que venían de Capacho y San Cristóbal. Entre todos, calculo 200», enfatizó Felipe al lamentar que ya no puedan cruzar frontera como los hacían antes del 15 de mayo.
Pide a las autoridades mayor flexibilización, pues se trataba de una alternativa de trabajo informal ante la nula posibilidad de empleo formal, pues el comercio en el eje San Antonio – Ureña sigue paralizado en un 90%.
«Era una entrada significativa para muchas familias», prosiguió el habitante de frontera, quien conminó a las autoridades a establecer una cantidad límite que les permita continuar con su trabajo.
No entiende el porqué permitieron que el oficio se enraizara por dos años, adhiriéndose cada día más motorizados, para luego paralizarlo de esta manera.
Jonathan Maldonado