Un apagón se registró este miércoles, en horas de la noche, en los municipios Bolívar y Pedro María Ureña, tras experimentar dos días en los que los cortes se habían disminuido considerablemente.
Cerca de las 7:20 p.m. se presentó un bajón que dio paso a la suspensión del servicio eléctrico en dos localidades cuyos habitantes han protagonizado varias protestas en los últimos días, para exigir el cese de los cortes y el restablecimiento del agua por tubería.
Al día, se contabilizan, como mínimo, suspensiones del servicio de electricidad de 12 a 15 horas, dependiendo del sector o del circuito. Las calles, al entrar la noche, son iluminadas por los focos de los carros y motos.
«No duró mucho el encanto», manifestaron algunos ciudadanos en sus estados de WhatsApp.
Jonathan Maldonado