Son 16 los países de América Latina que vienen recibiendo a diario un poco más de 3 millones 700 mil personas de migrantes venezolanos, informó Eduardo Stein, delegado de Venezuela ante el alto comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
El comisionado advierte que el flujo continúa, lo que podría llegar a unas cinco mil personas. “Y si este flujo se mantiene sin cambios, vamos a llegar a superar los cinco millones a finales de 2019”, vaticinó.
Stein afirmó este viernes en una entrevista con La Voz de América, que a pesar de que existe un esfuerzo combinado en donde Acnur juega un papel junto con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), de coordinador general de servicios, de todas las agencias de Naciones Unidas, en diferentes capacidades, según su tema de especialidad, y también con organizaciones de sociedad civil y con iglesias.
Acerca de las posibilidad de que los organismos humanitarios receptores consideren apropiado construir campos de refugiados en Latinoamérica, Eduardo Stein, advirtió de que sobre el tema existen dudas al respecto.
“Personas con experiencia en esto tienen dudas sobre la eficacia de campos de refugiados, porque, aunque en cierto tipo de servicios podría ser más eficiente en la forma de atender a los recién llegados, el hecho es que a estos les limitan sus libertades individuales y familiares, están confinados”, detalló.
El delegado subrayó que lo que sucede en Venezuela no se puede comparar con ninguna crisis que haya ocurrido en América Latina.
“El alcance, el tamaño, la complejidad y las consecuencias de este desastre humanitario no tienen antecedentes en la historia del hemisferio”, sostuvo Eduardo Stein.