Los colombianos celebrarán esta noche con las habituales reuniones familiares la llegada del Año Nuevo, que abre la puerta para los primeros carnavales de 2022, esta vez en medio de la aprensión por el aumento de contagios de covid-19 por la variante ómicron.
La Nochevieja en Colombia se caracteriza por encuentros de familiares y amigos para cenar, beber y esperar la cuenta atrás para el Año Nuevo, pero sin eventos masivos como conciertos o espectáculos de fuegos artificiales.
En muchos pueblos del país se mantiene viva la tradición de la noche del 31 de diciembre de la quema del «Año Viejo», un muñeco en el que la gente se deshace de manera simbólica de todo lo malo del año que termina.
Después de la Feria de Cali, que ocupa la semana de transición entre la Navidad y el Año Nuevo comienzan los festejos populares en otros lugares del país, principalmente en zonas de frontera.
Es así como del 2 al 6 de enero se celebra el Carnaval de Negros y Blancos en Pasto, capital del departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, o del 4 al 6 el Carnaval de Ocaña, segunda ciudad de Norte de Santander, limítrofe con Venezuela.
Manizales, capital del departamento de Caldas, en el centro del país, se celebra su feria del 2 al 10 de enero, que incluye la principal temporada taurina del país.
Otra celebración que marca el comienzo del año en Colombia es el Festival de Música de Cartagena, del 7 al 15 de enero, dedicado a la música clásica.
En esta ocasión, la XVI edición estará dedicada a la música instrumental de cámara del siglo XIX que se compuso en Alemania, Austria, Francia, Italia y países de Europa del Este.
Ante el crecimiento en los últimos días de los casos de covid-19 después de cinco meses con la pandemia a la baja, las autoridades han comenzado a tomar medidas para evitar las aglomeraciones de gente en estos festejos y reducir en lo posible la propagación del coronavirus.
Con información de EFE y medios locales