El juez R. Lee Smith del séptimo circuito judicial de Florida, Estados Unidos (EEUU), sentenció a cadena perpetua al adolescente Aiden Fucci, de 16 años, acusado de asesinar a una compañera de escuela de 13 años con 114 puñaladas en mayo de 2021. Fucci fue juzgado como adulto y se declaró culpable de asesinato en primer grado para evitar la pena de muerte, que aún está vigente en este estado de la unión americana.

El padre de la víctima, Forrest Bailey, expresó su satisfacción con el resultado y considera que es el veredicto correcto, dado lo atroz del crimen y el comportamiento de Fucci. La sentencia no tendrá opción de revisión, al menos por los primeros 25 años.

La víctima, Tristyn Bailey, era animadora en la Academia Patriot Oaks, donde Fucci cursaba octavo grado y ella, séptimo grado. El caso comenzó el 9 de mayo de 2021, cuando la familia de Bailey denunció su desaparición al no volver a casa. Al día siguiente, su cuerpo sin vida fue encontrado con un total de 114 puñaladas en un área boscosa del vecindario de Durbin Crossing, después de un día de búsqueda. Las pruebas encontradas en la investigación preliminar, incluida una grabación de una cámara de vigilancia, llevaron a los agentes a identificar a Fucci como el principal sospechoso.

Inicialmente, el adolescente fue acusado de asesinato en segundo grado, pero el cargo aumentó debido a la gravedad del delito. El caso se considera uno de los más difíciles del condado de St. Johns, ubicado al noreste de Florida. Además, unos días después del hallazgo del cuerpo, se encontró una extraña grabación en la que se veía a la madre de Fucci cogiendo unos pantalones ensangrentados de su hijo. Ella fue detenida en 2021 y acusada de manipulación de evidencias por limpiar las manchas de sangre de la prenda.

El asesinato de Tristyn Bailey ha conmocionado a la comunidad y a todo el país, y la sentencia de cadena perpetua para Aiden Fucci refleja la gravedad del crimen cometido.

Redacción web