La comunidad internacional condenó este domingo con firmeza el nuevo ensayo nuclear, el sexto, de Corea del Norte. “Las palabras y las acciones [de Corea del Norte] continúan siendo muy hostiles y peligrosas para Estados Unidos”, escribió en un tuit el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
China, el principal apoyo económico de Corea del Norte, también “condenó vigorosamente” la prueba, y pidió a Pyongyang que “cese sus acciones erróneas que agravan la situación y no sirven a sus propios intereses”.
Igual que China, países como Rusia, Japón y Francia no tardaron en condenar la nueva violación de las numerosas resoluciones de la ONU, que exige el fin de los programas nucleares y balísticos norcoreanos.
Aunque Rusia condenó el ensayo nuclear por el “desprecio” de Corea del Norte a las resoluciones de la ONU, hizo también un llamamiento a la calma.
La energía generada por la prueba de una “bomba de hidrógeno”, este domingo, provocó un sismo de magnitud 6,3, según los servicios de meteorología surcoreanos, entre cinco y seis veces más que el temblor que provocó el test anterior, en septiembre de 2016.
El Consejo de Seguridad de la ONU se reúne este lunes de emergencia para adoptar decisiones. (AFP)