(AFP) El embajador de España en Venezuela, Jesús Silva, anunció este domingo su partida dando cierre a su misión en Caracas, después de que el gGobierno español degradara su representación diplomática en el país caribeño.
«En el día de hoy salgo de Venezuela y termino mis funciones como embajador de España. (…) Perdón por lo que no hice y gracias por la ayuda de tantos grandes amigos que dejo aquí. Hasta pronto y que viva Venezuela», escribió Silva en Twitter.
Tras unos «años muy intensos», según el diplomático, Silva será reemplazado por un encargado de negocios, ya que España cuestiona la legitimidad del gobierno del socialista Nicolás Maduro, informó a finales de octubre la responsable para América Latina del Ministerio de Asuntos Exteriores español, Cristina Gallach.
«El reconocimiento que se da a las actuales autoridades» venezolanas no permite «la presentación formal de una petición de plácet» para un nuevo embajador, destacó Gallach.
España, por su parte, forma parte del medio centenar de países que reconoce como presidente encargado a Juan Guaidó, jefe del Parlamento venezolano.
El anuncio se produjo luego de que el 25 de octubre llegara a España el líder opositor Leopoldo López, quien salió clandestinamente de Venezuela tras haber permanecido en calidad de huésped por 18 meses en la residencia del embajador español en Caracas.