El arquero español, Iker Casillas, quien milita en el Oporto de Portugal, abandonó este lunes el hospital que lo atendió después de sufrir un ataque al corazón el pasado miércoles durante un entrenamiento con su club.
El guardameta de 37 años habló frente a la prensa y reconoció no saber qué será de su vida a partir de ahora, reseñó la agencia internacional AFP.
«Hace unos días tuve un acontecimiento, me tocó a mí y aquí estamos. Es difícil hablar, estoy muy agradecido, he tenido mucha suerte. Me han hecho sentir muy querido los que se han preocupado.», dijo frente a las personas y periodistas que esperaban por su salida.
El ex capitán de la selección de España, campeona del mundo en 2010, se le vio de la mano con su pareja, la periodista Sara Carbonero.
A Casillas lo operaron para ponerle un catéter.
AFP