Los 630 migrantes rescatados hace una semana por el buque humanitario «Aquarius», en el centro de tensiones en la UE por la cuestión migratoria, desembarcaban este domingo en España tras un largo periplo de una semana por el Mediterráneo.
Con las primeras luces de la mañana, un primer navío con 274 de los migrantes, el «Dattilo», de la Guardia Costera italiana, entre en el puerto de Valencia (este) hacia las 04H30 GMT, constató un periodista de AFP.
Unas cuatro horas más tarde, y ya bajo un candente sol, el propio «Aquarius», fletado por la oenegé francesa SOS Méditerranée y Médicos Sin Fronteras (MSF), hizo su entrada en el puerto.
El último barco de la flotilla, el italiano «Orione», debe llegar en las próximas horas para terminar de desembarcar a los migrantes, recibidos en la ciudad española por un amplio dispositivo de más de 2.000 personas, entre voluntarios de Cruz Roja, médicos, intérpretes y policías.
A su llegada, se escucharon en los barcos aplausos de alegría por el fin de un agotador viaje de 1.500 kilómetros por el Mediterráneo, por momentos con mal tiempo.
La operación era observada desde una distancia de 200 metros por los periodistas, sin acceso al área de desembarco ni a los migrantes, para proteger su privacidad. AFP