Khashoggi, exasesor del gobierno saudí que se autoexilió en Estados Unidos el año pasado para evitar un posible arresto, ha sido crítico de algunas políticas de la corona saudí y de la intervención de Riad en Yemen.

“No hemos podido contactar a Jamal hoy y estamos muy preocupados sobre dónde pueda estar”, dijo la editora internacional del Post, Eli Lopez, en un comunicado.

“Estamos monitoreando la situación de cerca, tratando de recabar más información. Sería injusto e indignante si fue detenido por su trabajo como periodista”, dijo.

El Departamento de Estado estadounidense también dijo que está investigando lo sucedido.

Arabia Saudita, en el lugar 169 de 180 en el índice de libertad de prensa de RSF, ha llevado a cabo una campaña de modernización desde la llegada del príncipe Mohamed como heredero del trono.

Pero el reino ultraconservador, que fue aplaudido en junio por finalmente levantar una prohibición a las mujeres para conducir, ha sido muy criticado por su forma de manejar la disidencia. AFP