Carlos Larrazabal, presidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecamaras), destacó que los primeros días de enero han sido sumamente complejos para toda la cadena comercial del país.
“Vimos como la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde), empezó a bajar unilateralmente precios, sin revisar estructuras de costos, sin derecho a la defensa, lo que produjo olas de saqueos controlados que acabaron con los productos en los anaqueles y ahora tenemos la grave dificultad de reponer esos inventarios”.
En entrevista en el circuito Éxitos de Unión Radio, destacó que a eso se suman los saqueos de los que ha sido objeto el trasporte de alimentos y otros insumos, lo que impide que los productos lleguen a los anaqueles en las diferentes ciudades del país.
“Si el gobierno no está garantizando ningún tipo de seguridad en las carreteras para que los productos que vienen de los Andes y de los Llanos lleguen al centro del país, si eso no se solventa y viene otra arremetida, el resultado será más desabastecimiento, más inflación, más mercados informales y los bachaqueros son los que progresan y eso afecta al consumidor, al empleo, al trabajador y a las empresas”.
Larrazabal considera que el gobierno manipula la crítica situación que genera la inflación a su favor “y eso se agrava en Venezuela donde tienes un mercado cambiario y dependes de materias primas e insumos importados y no tienes acceso a las divisas desde agosto y eso hace que en el mercado no exista un dólar oficial que no sea diferente al del mercado negro y eso origina una presión en los precios muy importante, pero el gobierno no aborda el tema cambiario para buscar una solución”.
Larrazabal insiste en que la única manera de solucionar el problema de la inflación y la escasez es desmontando el sistema cambiario y estableciendo un mercado cambiario libre y eso es lo que hemos venido pidiendo, de manera reiterada, para bajar al mercado negro porque eso está presionando continuamente, y eso también afecta a los insumos del Estado”.
“Es una mezcla de condiciones que presionan los precios hacia arriba pero eso se corrige con políticas económicas, confianza y aumentando la producción pero el gobierno hace todo lo contrario al tomar medidas que restringen la producción”, aseveró.
Advirtió que si el ejecutivo continúa aplicando “medidas tipo policiales”, que en vez de abordar la raíz del problema lo atacan por la vía de de la persecución al sector, la solución no será diferente y la problemática empeorará.
Larrazabal explicó que solo se está sembrando 30% de las áreas cultivables porque gobierno no permitió las divisas para semillas y fertilizantes, eso es lo que genera desabastecimiento de productos en los mercados”.
“Las fábricas están prácticamente paralizadas porque no tienen materias primas, eso es lo que hay que discutir en esas reuniones abordando no la persecución sino las medidas a tomar para incrementar la producción, y eso no se hace con persecución policial y eso no se ve por ningún lado”, concluyó.