(AFP) Venezuela cerró 2019 con una tasa de homicidios de 21 por cada 100.000 habitantes, 12 puntos menos que en 2018, aseguró este miércoles el gobierno.
Las muertes violentas se redujeron 36,8%, dijo el ministro de Interior y Justicia, general Néstor Reverol, en la televisión gubernamental, sin detallar el número de asesinatos cometidos en este país de 30 millones de habitantes.
El gobierno socialista de Nicolás Maduro viene reportando un descenso sostenido en la media de homicidios desde 2016, cuando dijo que había llegado a 56 por cada 100.000 habitantes.
Un informe presentado en diciembre pasado por la ONG Observatorio Venezolano de Violencia (OVV) reveló, sin embargo, que la tasa de muertes violentas en el país se ubicó en 2019 en 60,3 por cada 100.000 personas.
De acuerdo con la organización, los homicidios en Venezuela cayeron el año pasado a 16.506, 32% de los cuales ocurrieron en el marco de operativos policiales contra presuntos delincuentes.
El gobierno se refiere a esos casos como “resistencia a la autoridad” y no los incluye en sus estadísticas. No obstante, entre 2016 y mayo pasado reportó 17.849 casos, que involucran a distintos organismos.
La alta comisionada de derechos humanos de la ONU, Michelle Bachelet, sostiene que muchos de esos decesos “pueden constituir ejecuciones extrajudiciales”.
Reverol desmintió el balance del OVV, al que acusó de “distorsionar” las cifras en una “guerra contra el gobierno”. También aseguró que las estadísticas oficiales pueden ser sometidas a “cualquier auditoría”.
Venezuela, uno de los países más violentos del mundo, atraviesa una dura crisis económica y política que ha empujado a más de 4,6 millones de venezolanos fuera del país.