En Venezuela, la infancia sufre una profunda desprotección, según especialistas, quienes señalan la multiplicación de los infanticidios y la inexistencia de políticas públicas para prevenir agresiones y asesinatos. De acuerdo con el Centro de Justicia y Paz (Cepaz), en 2022, cada nueve días murió una niña por feminicidio, lo que revela la gravedad de la situación.
Los infanticidios se han multiplicado en Venezuela en los últimos años, según informes de instituciones del Estado que son seguidos por ONGs que hacen seguimiento, ya que no hay cifras globales oficiales al respecto. Cepaz es una de las pocas organizaciones que sigue este tipo de crímenes y en 2022 se registraron 37 feminicidios de niñas, 22 de ellas menores de cinco años de edad.
El coordinador de la ONG Centro Comunitario de Aprendizaje (Cecodap), Carlos Trapani, plantea la escasa información como una de las dificultades para atender y prevenir agresiones a niños, y explica que cuando no hay cifras oficiales, existe «debilidad institucional para dar respuesta».
Un caso reciente es el de Osleyner, un niño de cinco años que fue asesinado a golpes por su padre, pese a varias alertas de vecinos preocupados que informaron sobre el maltrato al menor. La tía del pequeño, Rachel Díaz, asegura que jamás supieron del maltrato que sufría y que tuvieron que dejarlo bajo los cuidados del padre porque la madre del niño atravesaba un agresivo cáncer, por el que murió un mes después de conocer del asesinato. El asesino fue condenado en un juicio «rápido», pero esto no sanó las heridas de la familia, que cree que se pudo evitar.
Trapani aseguró que, aunque hubo un esfuerzo reciente del Estado para atender los hechos de violencia hacia menores, el reto actual implica la «intervención oportuna desde la prevención» para revertir efectos como las agresiones continuas y asesinatos. «La familia está muy a la deriva, la escuela está muy debilitada, la sociedad está tratando de resolver su cotidianidad y no hemos tenido una mirada centrada en el niño, y mientras eso no cambie los contextos de violencia van a seguir incrementándose», afirmó Trapani.
La situación en Venezuela es alarmante y los especialistas advierten que es urgente la necesidad de políticas públicas para prevenir la violencia contra los niños y para garantizar su protección. La sociedad debe tomar conciencia de este problema y actuar en consecuencia para evitar más tragedias.
Redacción web