Nacional
«Pérdida de aprendizaje», una conclusión del foro sobre año escolar
6 de agosto de 2021
El foro titulado ‘¿Cómo terminó el año escolar en Venezuela?‘ efectuado en la mañana de este viernes 6 de agosto, no solo se quedó en el diagnóstico, cuyo balance desafortunadamente es negativo, sino que planteó, por parte de los panelistas, una serie de retos y desafíos para el nuevo período académico que se avecina.
Uno de los primeros denominadores comunes concluyentes en el panel fue el de «pérdida de aprendizaje». Conclusión a la que llegaron cada quien en su estilo: el Director General de Fe y Alegría Manuel Aristorena; Henry Renna, del Clúster de Educación en Venezuela; Olga Ramos, de la Asamblea de Educación, Fausto Romeo de la Asociación Nacional de Institutos de Educación Privada; Luisa Pernalete de Fe y Alegría y Lilia Vega, de la Red de Madres, Padres y Representantes.
Nuevamente los problemas de conectividad, las fallas eléctricas, la deserción de estudiantes, la falta de servicios básicos como agua y otros servicios en los hogares y escuelas, destacaron como los componentes principales que dificultaron el desarrollo efectivo de este segundo año escolar en pandemia en Venezuela.
A esto se suman las todavía palpables y evidentes deterioradas condiciones de más del 90% de los planteles en todo el país, sobre todo de la red pública, así como el pronunciado deficitario ingreso de los docentes venezolanos, que aun cuando se les acaba de aprobar un nuevo incremento salarial, aún no superan los 10 dólares mensuales.
Sin embargo, los especialistas proponen y urgen a que el regreso a clases presenciales en el país «debe ser inminente, garantizando todas las medidas para la seguridad de los estudiantes y los maestros».
Para que el retorno suceda en las escuelas se tienen que dar condiciones no solo físicas, de infraestructura y servicios básicos, sino también garantizar la debida preparación académica y buena paga de los docentes, así como la posibilidad «del libre pensamiento y el no adoctrinamiento».
Sobre la cualificación de los maestros, Ramos alertó que hoy día hay una importante cantidad de personas «que son bachilleres y los graduaron como docentes a través de una micro misión. Eso es un grave problema para la calidad educativa porque no están debidamente formados».
En este punto, la profesora Olga Ramos remarcó que la «pandemia lo que hizo fue incrementar las desigualdades de la emergencia humanitaria compleja de Venezuela».
Para replantear el ejercicio de la docencia recomendó «tomar, por ejemplo, la red radiofónica de Fe y Alegría para apoyar a los docentes en el desarrollo de las actividades académicas y formativas».
En relación al plan gubernamental Cada Familia Una Escuela, que se comenzó a implementar desde el Ministerio de Educación desde el mismo inicio de la declaratoria de la pandemia del Coronavirus en el país, la investigadora cuestionó que no es un diseño para la educación a distancia «porque, entre otras cosas, las guías de aprendizaje no son para una educación a distancia sino para clases presenciales».
El mejor escenario para el profesor Fausto Romeo «es que los estudiantes vuelvan a las aulas, pero preguntarnos cuántos van a regresar, cuántos estudiantes, cuántos profesores, de los cuales la mayoría están desmotivados y se han ido». Pero también recomendó que el retorno a los salones de clases se haga de manera progresiva desde el mes de septiembre.
Los bodegones educativos
Denuncia que hace el presidente de Andiep. «Son casos de extremos legales que he denunciado, no son refuerzos pedagógicos. He conocido de casos de estudiantes que presentaron sus exámenes teniendo delante al profesor a quien le pagaban entre 30 y 40 dólares para que los pasaran», dijo.
Romeo llama a esto la existencia de «colegios paralelos», cuyos responsables han montado un sistema no legalizado que imparte clases no autorizadas por parte del Ministerio de Educación.