El mayor general del Ejército y exjefe de Inteligencia, Miguel Rodríguez Torres, inició una huelga de hambre, confirmó su hija Estefany Rodríguez a través de su cuenta en la red social Twitter el pasado 12 de julio.
“Exijo que el Dgcim (Dirección General de Contrainteligencia Militar) cumpla con sus deberes y nos permitan como familia visitarlo y verificar que se encuentra bien de salud“, manifestó su hija a través de la red social. Agregó que es responsabilidad del gobernante Nicolás Maduro y el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, que se respeten los derechos humanos de su padre.
La diputada Adriana Pichardo señaló a través de la red social que la Corte Marcial confirmó a la defensa del mayor general que Rodríguez Torres se encuentra en huelga de hambre desde el lunes 8 de julio. Denunció que ha perdido 14 kilos y se encuentra amarrado a su cama con una sábana. El coronel Hannover Guerrero, quien se encarga de torturarlo, ha intentado darle de comer por la fuerza.
Detención
El exministro de Interior y Justicia del chavismo fue trasladado a una cárcel de “máxima seguridad” en Fuerte Tiuna el pasado 9 de mayo, según informó el Movimiento Amplio Desafío De Todos en su cuenta de Twitter.
El militar retirado estaba recluido en la sede de Boleíta de la Dirección General Contrainteligencia Militar, estado Miranda. Allí fue recluido desde el 13 de marzo de 2018 por funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), cuerpo de investigaciones que estuvo bajo su cargo desde 2002 hasta 2013.
Se le imputan los delitos de espionaje, conspiración e instigación a la rebelión, según consta en su expediente. En abril estuvo incomunicado por 15 días en una celda de la Dgcim de Boleíta, estado Miranda. En ese entonces, se encontraba en buena forma, a pesar de que había perdido peso, informó el secretario encargado del Movimiento Amplio Desafío de Todos.