Nacional
Sociedad Venezolana de Hematología exige «soluciones urgentes y definitivas» ante el déficit de reactivos
22 de enero de 2018
La Sociedad Venezolana de Hematología (SVH), alertó sobre la difícil situación que atraviesan los laboratorios tanto públicos como privados del país a causa del déficit de reactivos e insumos en sus instalaciones para la evaluación de la sangre que requieren los pacientes.
En un comunicado la SVH y su Grupo Cooperativo de Medicina Transfusional (GCMT), se exhorta a las autoridades del Ministerio de Salud a buscar «soluciones urgentes y definitivas» a los retrasos en el suministro de los reactivos para realizar las pruebas serológicas para el descarte de enfermedades transmisibles por la transfusión como: Sífilis, Chagas, Hepatitis B y C, Sida y HTLV.
El déficit trae como consecuencia la imposibilidad de cumplir con las demandas de sangre de las personas que las necesitan, la suspensión de intervenciones quirúrgicas, la imposibilidad de brindar tratamiento transfusional a pacientes oncológicos, renales, hematológicos, entre otros.
Y, actualmente, la situación se ha agravado al punto «que ni siquiera podemos asegurar las transfusiones que requieren los pacientes en situaciones de emergencia», se lee en el comunicado firmado por la junta directiva de la SVH.
Ochenta o noventa por ciento de los materiales que se usan en los bancos de sangre son importados y los proveedores alegan que se retrasan las compras porque no tienen acceso a las divisas extranjeras.
La ausencia de reactivos y de otros insumos requeridos en el proceso transfusional, como bolsas de recolección de sangre, equipos de transfusión, buretroles, filtros de leucoreducción también la sufren los bancos de sangre privados.
Los médicos hematólogos coinciden en que de no tomarse las medidas correctivas en el corto plazo, la mayoría de los bancos de sangre quedarán inoperativos, exponiendo la vida de cualquier persona que resida en el país y que necesite una donación de sangre o de alguno de sus componentes.
La coyuntura no solo afecta la asistencia, también compromete la formación académica, pues quienes cursan estudios en la Escuela de Bioanálisis de la UCV no cuentan con los recursos para llevar a cabo las prácticas de laboratorio. Sin reactivos no pueden realizar los estudios inherentes a su disciplina.
María Cabrera, presidenta del Colegio de Bioanalistas del Distrito Capital y Miranda, precisa que del grupo de 10 a 15 exámenes a los que debe someterse una bolsa de sangre antes de colocársela al paciente, a lo sumo se le pueden realizar 2 ó 3.
«Todo es importado y no está llegando al país. No nos podemos hacer responsables de transfundir sangre sin saber si esto le puede ocasionar una enfermedad a la persona, como ocurre en situaciones de guerra», dijo Cabrera y agregó que la mayoría de las operaciones requieren transfusión sanguínea.
Informó que los laboratorios clínicos, tanto privados como públicos, se enfrentan a un déficit, que oscila entre 70 y 80 por ciento, de reactivos para pruebas especiales como perfiles hormonales, tiroideos y marcadores tumorales.
La falla se ubica en 50% cuando se trata de reactivos para pruebas básicas de coagulación o hepáticas. Las consecuencias las sienten los usuarios que deben pagar más de Bs 200 mil por un Perfil 20. «Cualquier prueba simple supera los Bs 100 mil. Hay pequeños laboratorios que están cerrando porque no pueden subsistir, cuando les toca reponer los reactivos el costo es muy elevado».
Las casas comerciales que abrieron sus puertas esta semana no dan precios pues desconocen cuáles son los insumos que van a poder importar. El panorama es incierto, reseñó El Universal.