Desde hace tres semanas los pacientes con insuficiencia renal “están sufriendo una cantidad de problemas” por un desperfecto que registra la bomba que se encarga de enviar agua a las máquinas de diálisis del Hospital Universitario de Maracaibo.
Esto según informó el vocero de la asociación de pacientes renales en Maracaibo, José Luis Tello.
“Esta máquina tiene bote de aguas. Esta problemática se ha denunciado y se ha hablado con la doctora Alfonsina (Romero) y lo que han hecho es tratar de medio acomodar y está en peligro la planta”, detalló.
Aunque la directiva ha enviado a reparar la bomba, para Tello son “pañitos calientes”, y que se dañe esa máquina implica invertir mucho dinero, el cual “el IVSS no va a reponer”.
Tello agregó que para lograr conversar con la directora de este centro hospitalario, Alfonsina Romero, tuvieron que protestar este jueves 08 de abril en el piso 9 donde está ubicada la Unidad de Nefrología.
“Me atendió porque amenazamos. Trancamos la Unidad, sino no nos atienden”, aseveró.
Son aproximadamente 100 personas que se ven afectadas por esta situación: “52 pacientes fijos, 26 pacientes hospitalizados, más los que están en emergencia que deben ser 10 o 12 y algunos pacientes contagiados con Coronavirus que caen diálisis”, agregó Tello.
Por otra parte, alertó que los pacientes están recibiendo solo una hora de diálisis, cuando deben dializarse durante tres horas y media.
“Las máquinas de diálisis necesitan agua purificada para realizar la desintoxicación de los pacientes. Ser paciente renal significa depender de una máquina para poder vivir”, explicó.
Entre tanto, la directora del Hospital Universitario de Maracaibo (HUM) y la Jefa de la Unidad de Nefrología, Beatriz Rosales, se comprometieron a reparar la bomba para este jueves. Sin embargo, no hubo confirmación de esto al final del día.
Los ascensores del HUM aún no funcionan completamente
José Luis Tello, también defensor de los derechos humanos, dijo que hay “un 30% de pacientes que están en silla de ruedas y 6% en cama y los demás tenemos problema de movilidad consecuencia de la enfermedad”. Estos pacientes, con estas condiciones, deben subir hasta un noveno piso por las escaleras donde queda ubicada la Unidad de Nefrología, porque el ascensor no funciona del todo.
Tan solo funciona uno y es “el ascensor de covid”, cada paciente de nefrología que se monta en ese ascensor corre el riesgo de contagiarse.