UNA COSA es tener el periódico en la mano, y otra muy distinta hacer un periódico para el consumo de los lectores… CORRÍA LA década de los 70, cuando se produjo en el estacionamiento del Hospital Central un hecho inusual… SALÍAN VELOZMENTE un motorizado y su parrillero luego de haber cometido un robo, y el médico Pedro Humberto Duque les gritaba a plena voz que se pararan y devolvieran la cartera que habían despojado a una dama… EL REGISTRO del incidente, paso a paso, fue capturado por la lente de uno de los mejores fotógrafos que ha tenido Diario La Nación, quien tomó la secuencia del suceso de manera espectacular… DE INMEDIATO ese registro periodístico se publicó en la página policial del matutino de la forma más destacada, y sobre todo se ponderó la habilidad de su autor, el reportero gráfico José Armando “Pipo” Vivas, quien acaba de recibir la Orden “Dr. Pedro Rincón Gutiérrez” de la Universidad de Los Andes (ULA) Táchira, en reconocimiento a su loable labor como profesor en la cátedra de Periodismo Visual que enseña en la Escuela de Periodismo desde que esta se fundó… CON MÁS de medio siglo de experiencia, tiempo en el que no solo Armando Vivas ha acumulado toneladas de horas de trabajo, se ha convertido en un ícono, primero del trabajo reporteril y luego con la magia de la enseñanza… POR SU TRABAJO realizado para la noticia de sucesos de esa época, recibió muy merecidamente el Premio Nacional de Periodismo de Reporterismo Gráfico, al que fue sumando numerosos galardones a lo largo de su carrera que dignifica no solo su capacidad y talento, don de gentes y deseos de compartir conocimientos, sino su bondad, honestidad, honradez y cumplimiento con sus actividades, ayer como ejemplar fotógrafo de la noticia, y hoy como profesor de una cátedra que es ampliamente respaldada y admirada por las autoridades de la ULA-Táchira, honrada por la labor de su vicerrector, Omar Pérez Díaz.
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Y ESTO, es todo por hoy.
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MENTIRAS universales:
“Pipo espera su jubilación”.
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DIOS los bendiga, ¿Saben?
VICTOR MATOS