¿HABREMOS LLEGADO a la etapa de la vida muerta?, me decía ayer un consecuente lector, pues recordaba que en el ambiente se respira a gente sin ganas de hacer nada, con la moral por el piso, con cuadros preocupantes de depresión, debido a que ven gris su norte, nublado su horizonte y oscuro su futuro…COMO ESTÁN las cosas, señalaba, vamos por la vida con un diablo a la izquierda y otro diablo a la derecha, y de seguir así, se preguntaba: ¿entonces, cómo diablos vamos a salir de esta?…ES COMO TRANSITAR entre bienhechores y malhechores, ir por el mundo en la cuerda floja o caminando entre el bien y el mal, presos del pesimismo, cero creatividad, reafirmando la vida muerta ante la agonía del día, que en lugar de redimirnos, estrangula sin pasión…CONSUMIMOS HORAS de horas haciendo cola para la gasolina. Nos paraliza la espera por el gas. Nos inunda la impotencia ante la falta de recursos para comprar lo indispensable. Pasamos el tiempo mirando el suelo, rumiando nuestras calamidades, entristeciendo el espíritu…Y ASÍ PASAN los días, y yo desesperando, y tú, tú contestando quizás, quizás, quizás, como la letra del bolero centenario, pues se han soltado tantos programas, tantos pedidos, tantas promesas, que ya nos sentimos abrumados y escépticos porque nada sale como se espera…POR ELLO, ¿cómo distinguir por dónde anda Dios y por dónde anda el diablo? No olvidemos la máxima del alto oficial: “Tanto yo general, como hasta aquel sencillo soldado, nos hallamos todos desnudos ante los ojos de Dios”…EN CUANTO a la vida muerta, mientras existimos la muerte no existe, y cuando la muerte existe, ya nosotros no existimos, por ello hay que seguir con la mente en alto, con el optimismo presente, con el sueño del mañana mejor, pues de lo contrario sí que caminaremos como muertos vivientes…EN ESTOS ÚLTIMOS veinte años hemos tenido cuatro gobernadores en el Táchira: dos militares revolucionarios y dos civiles de la oposición, y aunque sea de extrañar la calidad de vida del tachirense, ha sido tan lamentable como jamás se había experimentado en el siglo pasado…LAS OBRAS de envergadura o de menor cuantía se detuvieron inexplicablemente. Los servicios se deterioraron. La calidad en la educación, la salud, el trabajo, menguaron lastimosamente y, lo peor, se abandonó cualquier atisbo de desarrollo en la región…SE ACABARON los grandes proyectos, como la Hidroeléctrica Uribante-Caparo, la autopista San Cristóbal-La Fría, el Centro Cívico San Cristóbal, por recordar los más significativos, y nos quedamos para luchar por nuestra propia sobrevivencia, no sabemos si fijando la vida muerta, o quizá la existencia moribunda.
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Y ESTO, es todo por hoy
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MENTIRAS Universales:
“Hemos descubierto el camino a la felicidad”
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DIOS los bendiga…¿Saben?
VÍCTOR MATOS