PARA LOS AMANTES de las cábalas, los profetas del desastre, amantes del Armagedón, dicen que el número 6 es fatídico (el 666 es sinónimo del número infernal), en donde el diablo ha metido las patas, cachos y hasta el rabo, y que ya estamos pisando la raya del infortunio…EMPEZAMOS el confinamiento por la pandemia el 6 de marzo y ya llevamos 6 meses de estar en cuarentena, y recuerdan los bíblicos que fueron 6 los días de trabajo de Jehová para crear la Tierra, pues el séptimo lo dedicó al descanso…EL NÚMERO 6 nos persigue y en la semana lo dedicamos, esa fecha, al jolgorio, al festejo, y para el mundo cristiano, las más de las veces al pecado, convirtiendo al sábado por la noche en el ejercicio nocturnal, el desenfreno colectivo, en olvidarnos muchas veces hasta de las buenas costumbres…POR EL CORONAVIRUS, ahora no tenemos siquiera la posibilidad de ir a misa, en pos de redimir nuestras faltas y ese abracadabra, que abre las puertas a nuestras almas de redención, pues están cerradas desde hace 6 meses y no sabemos hasta cuándo lo será, pues las noticias sobre la vacuna anti-COVID-19 se anuncian sin revelar para cuándo aplicarla exactamente…MIENTRAS TANTO, sigamos cumpliendo con las disposiciones sanitarias, quedarnos en casa el mayor tiempo posible, no olvidemos el uso de la mascarilla, tampoco el espacio social con el prójimo y evitemos las reuniones de más de diez personas, cuando estemos obligados a ellas…EL VIRUS YA ESTÁ identificado, pero su eliminación dista de ser una realidad, pese a que el mundo científico está entregado en brindar la solución a lo que ha puesto de rodillas a la humanidad en todo el planeta…POR ELLO, es necesario que se dote de lo necesario a nuestros profesionales de la salud, muchos de ellos víctimas de este mal, que se insista en las campañas preventivas y, lo más importante, que mantengamos el mensaje divino: “Cuídate, que Yo te cuidaré”…FELIZMENTE, la sensatez ha hecho que las clases escolares continúen por la vía virtual, igual que la presentación de espectáculos, las conferencias de gremios y profesionales, pues de lo contrario, además de los problemas surgidos por estar encerrados en casa, se sumaría la multiplicación de esta enfermedad, que no tendrá respuesta hasta el primer trimestre del año próximo…NO ESPEREMOS a abandonarnos ante el fatídico 6 de los supersticiosos, sino en cumplir con los mandatos esgrimidos a la fecha, para no solo enfrentar al coronavirus, sino derrotarlo definitivamente y luego analizar nuestro comportamiento en medio de su reinado, que lleva ya desde su aparición en China en diciembre del año pasado.

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Y ESTO, es todo por hoy

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MENTIRAS Universales:

“No creo en ese cuento del triple 6”

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DIOS los bendiga…¿Saben?

VÍCTOR MATOS