EL PASADO 30 de julio fue un viernes que me obligó a rondar por las calles de la ciudad en busca de víveres para el hogar y por ninguna parte vi el izamiento de la bandera del Táchira, que por decreto de 1997 debía ondear en plazas y edificios como el pendón oficial regional, así como se hiciera ese día de hace 24 años por primera vez en el frontispicio del Palacio de los Leones…ME DI CUENTA de que la carencia de memoria histórica también se estaba entronizando en nuestro estado, pues el tricolor, amarillo, negro y rojo, inspiración de Mario Díaz Hernández, recientemente fallecido, fue aprobado por la entonces Asamblea Legislativa tras un concurso colectivo y refrendado por el gobernador Ricardo Méndez Moreno…BAJO EL SEUDÓNIMO de “Mayo”, Mario Díaz Hernández, promotor cultural, locutor, experto en protocolo y forjador en la Feria de San Sebastián de las emblemáticas Noches de Pasodoble en la Unidad Vecinal, concibió este emblema local, compuesto por el paño de tres colores, cuatro estrellas y dos granos de café, por lo que se mereció el recibo de la Orden al Mérito del estado Táchira…AL PARECER, no solo ha pasado desapercibido su creativo emblema, sino la observancia de una disposición oficial, pues no hubo el reclamo, ni del ahora Consejo Legislativo, ni de la Alcaldía del municipio San Cristóbal ni del Ejecutivo regional, que deberían tomar cartas en el asunto para mantener las obligaciones morales de nuestro gentilicio frente a tan trascendental efemérides…MARIO DIAZ HERNÁNDEZ no solo se merece el reconocimiento oficial y privado por su creatividad, sino que creemos debería ser perpetuado su nombre como epónimo de las Noches de Pasodobles, que desde el frente de la iglesia de la Unidad Vecinal recreó memorables veladas en homenaje a nuestro patrono San Sebastián…Y, ASÍ COMO ESTE caso, existen muchos otros que están pasando al olvido, como el reconocimiento a nuestros pasados hacedores del desarrollo cultural, deportivo, social, empresarial, que puso al Táchira en la cumbre de la gesta de sus hijos, tanto civiles como militares…POR EJEMPLO, a nadie se le ha ocurrido hacer realidad lo que fuera un sueño del arquitecto Henry Matheus, generador del Centro Cívico, con la realización del Paseo de los Presidentes, en donde se iban a destacar los bustos de los jefes de Estado andinos, empezando por Cipriano Castro, Juan Vicente Gómez, Isaías Medina Angarita, Eleazar López Contreras, Marcos Pérez Jiménez, Carlos Andrés Pérez y Ramón J. Velásquez, hombres incrustados en nuestra historia patria, lo que al parecer poco importa a nuestros dirigentes, ya sean políticos o culturales.
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Y ESTO, es todo por hoy
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MENTIRAS universales:
“Estamos orgullosos de nuestro pendón regional”
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DIOS los bendiga…¿Saben?
VÍCTOR MATOS