Pedro Morales
Mediados de junio de 1983, iniciaba los estudios universitarios en la entonces Facultad de Economía de la ilustre Universidad de los Andes (ULA). En una de las amplias aulas del edificio sede ubicado en el sector de La Hechicera, donde se tuvo la experiencia inolvidable de tener la primera clase, nos encontrábamos esperando aproximadamente 80 estudiantes de cuatro carreras universitarias: Estadística, Administración, Contaduría y Economía.
Ciertamente se esperaba con emoción que llegase el profesor de la materia: Introducción a la Economía I. Eran entonces las 10 de la mañana cuando se hicieron presentes al salón de clase el decano de la facultad, Dr. Edgardo Bianco, junto con dos profesores más. Aquí se recalca la extraordinaria calidad profesional y académica de los docentes que tuvimos en esa época, y sobre todo la calidad e integridad humana que siempre se les distinguía como modelo de vida a seguir.
Siguiendo con el relato, el ciudadano decano se dirigió a la audiencia y manifestó que los estudiantes de la carrera de Economía, trece en total en ese momento, tendríamos clase con uno de los profesores que le acompañaban. En efecto, se nos fue asignado un docente, economista, que recién regresaba de hacer postgrado en una prestigiosa Universidad de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).
Para el caso particular fue muy impactante en lo positivo, más aun que desde la misma presentación, sus palabras iniciales quedaron para siempre sembradas en mi subconsciente: “Si queremos ser buenos economistas, además de entregarse de lleno a estudiar economía, de la misma forma deben tener una muy buena base en una de las ramas de las matemáticas como es el cálculo numérico, leer filosofía, aprender de la psicología y estudiar comprensivamente la Biblia”. Mis respeto y aprecio por siempre Dr. J.W. Páez, bendiciones para usted y su familia. Salud y armonía son mis deseos.
También en la etapa como profesional de la economía, ejerciendo la digna la labor de docente universitario desde el año 1991, sea oportuno igualmente comentar la práctica didáctica que habitualmente se ha realizado en la primera clase, con la diversidad de seres humanos maravillosos que he tenido como estudiantes. Incluso desde la primera etapa de docencia siendo facilitador en el área de Cálculo, en la Escuela Básica de Ingeniería (ULA), hasta el año 1996, y luego en la Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET), desde el año 1997 (en Matemática al principio y después en unidades curriculares asociadas a la Economía), siempre hemos conversado acerca del problema económico que se encuentra presente en absolutamente todas las actividades de la vida, y en relación a ello se ha formulado una pregunta:
“¿Tener una relación sentimental tradicional entre un hombre y una mujer es un problema económico?” En términos generales, la respuesta siempre ha sido afirmativa, pero tomando en cuenta la visión materialista o monetaria del asunto, pero en muy pocas ocasiones la han tratado desde un enfoque o connotación espiritual, porque es precisamente desde esa dimensión donde se encuentra la solución efectiva y sustentable al problema económico.
En relación a estas vivencias y con lo planteado en los artículos recientes, se comparte para el que pueda estar interesado, la idea esencial de una clase a presentar este fin de semana ante el “Movimiento Apostólico Mariano” denominado “Salve María Auxiliadora: economía de la salvación y la felicidad verdadera”, que hace vida en la Parroquia Cristo Rey, de la ciudad de San Cristóbal, Estado Táchira-Venezuela (Los sábados cada 15 días)
Evidentemente la unidad didáctica guarda estrecha relación con el “Tratado de la verdadera devoción de la Santísima Virgen María”, y la lección que se planifica está concebida en los siguientes términos:
Introducción:
Dentro del marco que ofrece la “Ciencia de las cinco piedras angulares o pilares de consagración de Medjugorje”, la Eucaristía alimenta, y así como un alimento material nutre el organismo, la Eucaristía nutre espiritualmente la vida del ser humano. No es simplemente una metáfora, no es un simbolismo, es nutriente de vida. Se siente cuando hay fe, que vivifica interiormente, al generar sentimientos que van más allá de simples emociones, porque producen gozo en el corazón, paz en el alma, deseo de salir adelante, fortaleza para enfrentar las pruebas y dificultades, en pocas palabras: sana, libera, redime…
…Efectivamente, la acción de tal alimento espiritual nos da vida eterna, sacia nuestra hambre y nuestra sed interior. Sin embargo, si no hay fe, si no hay esa certeza, esa convicción de que es Jesús que se nos da en el pan eucarístico, no se tendrá la vida interior abierta para recibir este nutriente espiritual. Por ello, el “Tratado de la verdadera devoción a la Santísima Virgen María” representa el método genuino de enseñanza y aprendizaje conducente a construir el “Templo de Consagración”, fundado en la fe, en la confianza plena en la Misericordia de Dios a través de la Inmaculada Virgen María.
Objetivo General:
Aprender a aprender el conjunto de numerales integradores del Tratado de la verdadera devoción de la Santísima Virgen María (De San Luis María Gritnion de Monford).
Objetivos específicos respecto al: Capitulo III. Sección 3ra: María y los apóstoles de los últimos tiempos. Numerales: 55 y 56.
1ero. Conceptualizar el vocablo apóstol o apóstoles.
2do. Ejemplarizar el significado de: “oro del amor”, “incienso de la oración en el espíritu” y “en el cuerpo, la mirra de la mortificación”.
3ro.Identificar desde el ámbito teológico y gnoseológico la antítesis que se contrapone a la Santísima Trinidad.
4to. Mostrar la genealogía del patriarca Abraham.
5to. Contextualizar en tiempo y espacio el escenario relacionado con los “últimos tiempos”.
6to. Analizar a través de la teoría de la deconstrucción, la significancia de cada uno de los aspectos contenidos en la expresión “María es el medio más seguro, fácil, corto y perfecto para llegar a Jesucristo”.
Finalmente se concluye con algunas frases afines a la auténtica obra aquí reseñada:
“A quien Dios quiere hacer muy santo, lo hace muy devoto de la Santísima Virgen María”. “Cuando el Espíritu Santo encuentra a María en un alma se siente atraído irresistiblemente hacia esta alma, y en esta alma hace su morada”. “María no es el centro pero está en el centro”. “Dios creó un depósito de todas las aguas y lo llamó mar, y creó un depósito de todas las gracias y lo llamó María”. «Totus tuus ego suum, Maria, et omnia mea tua sum» (Soy totalmente tuyo, María, y todas mis cosas son tuyas)
Fuente: “Perspectiva Económica y Académica Contemporánea”. UNET. Años: 2018 a 2023. Pedro Morales. Postulante a Rector de la Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET)
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