Tampoco regresan, ni el tiempo ni las oportunidades perdidas, por ello los integrantes de la actual Asamblea Nacional se verán compelidos por el juicio de la historia. En la vida política todos tenemos responsabilidades por las que tenemos que rendir cuentas.
La denominada Asamblea Nacional roja-rojita aprovechó la circunstancia de no contar con diputados opositores en su seno y aprobó la casi totalidad de leyes que le dan vida al Estado comunal, y la vía legal de intervención de la economía y eliminación de derechos individuales. La gran pregunta es: ¿Cuál es la razón para no haber derogado todo lo que aprobó el chavismo en ese periodo, si ahora tenemos en la Asamblea Nacional la mayoría opositora?
El padre Luis Ugalde escribió una reflexión, titulada “algo peor”, indicando las condiciones para el éxito de un nuevo gobierno; y en su punto primero señala: “una gran unidad política centrada desde ahora en el cambio económico, social…” Resalto “desde ahora”. Entonces, este es el momento para que la actual Asamblea Nacional actúe desmontando el andamiaje jurídico-político que montó el chavismo. ¿Los actuales diputados pueden hacerlo? Claro, son mayoría.
Un problema que hoy tiene la dirigencia opositora de la MUD es creer que la falta de anclaje y respaldo es por responsabilidad de los llamados “guerreros del teclado” y no de ellos mismos. Tienen el diagnóstico equivocado; creer que es responsabilidad ciudadana el que así mismo se sienta defraudada, y no ellos que ofrecen lo que no concretan.
El periodo de la Asamblea Nacional está próximo a cumplirse, están perdiendo la oportunidad de echar por tierra las leyes comunistas. ¿De quién será la responsabilidad? De sus integrantes. Para una nueva elección se postularán los mismos. ¿Qué ofrecerán?, ¿lo que no hicieron cuando eran mayoría?
ACNUR prevé que los migrantes venezolanos llegarán a 6, 5 millones en este año próximo, el éxodo sigue, no se detiene. El llamado de los dirigentes es que “regresen”, pero siguen peregrinando, ¿la razón?, no ven alternativa, ni en la lucha de la MUD ni condiciones de vida en el comunismo.
Se viene nuevamente el tema del Comité de Postulaciones Electorales, en búsqueda de propiciar unas elecciones. Revisemos qué sucedió a lo largo de estos años en la Asamblea Nacional.
El presidente del Comité de Postulaciones electorales del año 2016 era el diputado Juan Guaidó, en noviembre de ese año la preselección estaba lista, pero esperaron para el mes de diciembre, y el 15-12-2016 no se pudo designar a los rectores del CNE por falta de quórum, tres diputados de oposición (no sé si les puede llamar así) no llegaron.
Otra vez, cuando correspondía hacerlo, no lo hicieron.
¿Qué sucedió? Que el 15 de noviembre, como resultado del diálogo oposición-régimen, Guaidó, como presidente del Comité de Postulaciones, solicitó a la junta directiva de la AN una prórroga para que el Poder Ciudadano postulase sus candidatos.
La oposición siempre espera por el oficialismo, desde el 23 de febrero, 30 de abril, se incorporaron a los diálogos, esperaron por los militares chavistas, aprobaron una ley de amnistía para perdonarles los delitos. Se levantó el Gobierno de la mesa; y otra vez se vuelve a esperar por un acuerdo con el oficialismo para nombrar rectores.
Nadie duda que Maduro está hoy más fuerte que en febrero de este año, y Guaidó más débil, por sus propias acciones. ¿Si Maduro está más fuerte, ¿qué le hace pensar que pactará un acuerdo electoral, si nadie está poniendo en peligro su estabilidad?
Y pensar que esta AN comenzó con las 2/3 partes de sus integrantes siendo de oposición. La preocupación surge en razón a que la oportunidad que hoy se tiene no se tendrá mañana.
Hoy es imprescindible romper con el habituamiento a vivir en la crisis, como si no lo fuera, así opera en el tiempo la revolución cultural; romper ese hecho pasa por contar con una organización que rompa ese acostumbramiento, desde la lucha no violenta.
Este elemento es vital para fortalecernos como sociedad que aspira a vivir mejor y no igual; pero se requiere una dirección política que lo entienda.
Ya se pasean los precandidatos, ¿lo entienden? No. Lo de ellos son solo elecciones.
El discurso choca contra la realidad. La ética en la política es fundamental.
Y así se fue el año 2019. Carlos Casanova Leal