La crisis económica y social, que se traduce en una impresionante pobreza para el ciudadano; sin luz, sin agua, sin gasolina, sin gas, sin efectivo; con el peso colombiano como moneda de circulación normal, sin alimentos, sin medicamentos, sin transporte público, sin trabajo, entre otras tantas cosas; se está profundizando peligrosamente rumbo a una explosión social, que pudiera ser un detonante de salida del régimen y de este valle de oscuridad donde estamos.
Para el ciudadano el tiempo se acabó, no puede esperar por salidas que no se concretan; ni pueden ser salidas donde se le pida que aguante más mientras se sale y después aguante mientras comenzamos a medio acomodar.
Necesitamos mucha coherencia en la oposición partidista. Se está hablando de salidas dialogadas y negociadas; y están justificando concesiones e incentivos al chavimadurismo para que acepten salir del poder. Y se escuchan afirmaciones como “con tal de salir de ellos démosle lo que piden”
Cuando se negocian principios, los ciudadanos perdemos.
Así tenemos que, la AN señalo que Maduro es usurpador de la presidencia y en razón de ello Güaidó como Presidente de la AN se hace presidente encargado. Pero dicen que en un eventual proceso electoral podría Maduro participar como candidato.
El solo hecho de participar aún y cuando pierda lo legitima. ¿Cómo quedan los delitos cometidos como usurpador?
Se dice que el PSUV es una fuerza política y que tendrían que participar en elecciones. Si Maduro es usurpador ¿su partido no lo es?, claro que es usurpador, y lo hacen desde la Asamblea Nacional Constituyente, desde donde los chavistas están usurpando las funciones del Poder Legislativo legítimo, desde donde imponen el estado comunista.
Esta revolución eliminó las 3 generaciones de derechos humanos establecidos en favor de la humanidad; imponen un modelo de dominación por hambre, eliminaron los derechos constitucionales de los venezolanos, arruinaron el país. ¿Se le puede dar connotación de fuerza política, cuando se imponen por el fraude y por la violencia?
Deben ser proscritos. El 10-05 de 1962, el gobierno democrático saliendo apenas de la dictadura militar, suspendió y prohibió las actividades del PCV y del MIR, por sus actividades que atentaban contra la estabilidad.
Así como a Rómulo Betancourt, Jóvito Villalba y Rafael Caldera, no les tembló el pulso para enmendar la constitución y prohibir al ex dictador Pérez Jiménez obtener cargos de elección popular. Y no fueron menos demócratas que los dirigentes de hoy.
Si el planteamiento fuerza de la oposición es el desplazamiento del régimen; lo que tiene es que construir la “amenaza creíble” que los doblegue. La oposición partidista lamentablemente está alejada de la posición de EEUU, que es quien puede hacerla y este dialogo en Noruega busca es neutralizar a EEUU de sus pretensiones de presión militar sobre el régimen.
El régimen de Maduro no puede sostenerse, lo menos que podemos hacer es entablar negociaciones, cuando esta convertido en un problema regional de seguridad, con las acusaciones de promover el terrorismo y el narcotráfico.
La oposición partidista debe recalibrarse, cambiar de asesores y acercarse a los países democráticos que son los que aspiran un cambio en Venezuela para una democracia liberal.
El régimen y los países socialistas van a Noruega en búsqueda de garantías para sus fortunas robadas, para que su partido no sea juzgado con sus dirigentes, para que no exista justicia.
La experiencia en la que debemos mirarnos es Colombia, en los diálogos de Paz; terminaron aceptando a las FARC como partido y sus delitos de narcotráfico como delitos conexos al delito político.
No podemos permitir que la justicia sea sustituida por la impunidad.
“la verdad os hará libres”
Dios los bendiga.
(Carlos Casanova Leal)