Psuv hace caravana de motorizados
28 de septiembre de 2024
Carlos Casanova Leal
Si no se revisan y se admiten los errores en la oposición, para producir rectificaciones, a lo que está obligada, el régimen pasará a tener mayor control social. Es indispensable admitir, en este punto, que ninguna acción política emprendida por la oposición ha logrado frenar o retroceder al Gobierno, esto es, el régimen nunca se ha detenido en la implantación del modelo.
El objetivo de la revolución es decretar para el 2020 la nueva Constitución Socialista, ya que en esa se establece el modelo de partido único, el Consejo de Estado con elección de segundo grado, la economía bajo control del Estado, las milicias como fuerza militar, y la elección de la Asamblea Nacional del Poder Popular.
La Asamblea del Poder Popular, que sustituiría al actual parlamento, está ya contenida en las leyes del Estado comunal y del poder popular, que paradójicamente la oposición no ha querido derogar o abrogar.
El régimen controla todas las instancias del poder, solo le falta la Asamblea Nacional; y controlarla pasa por definir dos acciones, terminar desmantelándola o convocando elecciones parlamentarias. Hemos visto y leído declaraciones de voceros de la MUD señalando que están pidiendo condiciones mínimas de participación.
Lo cierto es que si no nos organizamos desde la base para exigir condiciones plenas, única garantía de triunfo con la participación ciudadana, pues no se lograrán.
No existe un medio derecho, usted o tiene el derecho o no lo tiene; o tiene el derecho electoral o no lo tiene, pero no puede tener un medio derecho electoral. Las condiciones se tienen o no se tienen; fraccionar las condiciones es admitir que se asiste a un proceso con las cartas del fraude marcadas. Toda vez que las condiciones son totales, si aceptas las mínimas, aceptas las máximas de desconfianza.
¿Tiene la oposición la fuerza para pelear en la calle un fraude electoral? Primero tendríamos que responder ¿cuándo la oposición ha probado el fraude?, si siempre admite el triunfo del régimen. Por otro lado, si no tiene la organización es porque no ha querido, para exigir condiciones electorales, menos las tiene para reclamar el triunfo robado.
Esto nos conduce a un epicentro, sin organización no existe futuro para luchar por una república democrática. No pueden seguir arrogándose los partidos MUD, con apenas un respaldo del 14 %, la representación de toda la sociedad. No es posible que el PSUV cuente con un 18 % de respaldo. Vale decir, la aprobación por los partidos de oposición es muy baja por parte del 80 % de sociedad opositora. Esto obliga a repensar la organización. He manifestado también que la mejor estructura probada fue la del comando tricolor, donde la participación y toma de decisiones no recaían en cuatro partidos, sino en un amplio consenso social.
El régimen sabe cuál es la estrategia de la oposición en razón a que la oposición la ha expresado públicamente. Solamente sacará al régimen en una elección libre, condición que el régimen no dará, y frente al cual la oposición pide mínimas condiciones.
Sobre la oposición vienen el próximo año las grietas del debate, ya presente, en apoyar o no las sanciones que seguirá estableciendo el gobierno de Trump, ya existen opositores que están en contra.
La política es un arte, y en ella el arte del engaño, no para sus seguidores, sino engañar a sus adversarios, en este caso al régimen. Este engaño no fueron capaces de articularlo, cuando le advierten al régimen que solo lo sacarán por la vía electoral; además se lo garantizan cuando firman documentos dirigidos a la comunidad internacional expresando que no están de acuerdo ni apoyarían una intervención militar.
Esos documentos fueron suscritos por el temor cierto y no infundado de que podía existir, la carta se convierte en un documento, en consecuencia, que impidió que la amenaza creíble se construyera.
Finalmente, para que el Gobierno se resquebraje, se requiere una acción popular de presión permanente; esta organización de participación política no violenta es la que la MUD se niega a organizar. No se puede convertir la organización de la lucha en organización electoral y en ello hemos terminado siempre, y la válvula de salida que es la presión para que se produzcan otros detonantes, ha quedado mediatizada por la lucha de control partidista.
Si no existe reestructuración en la oposición no avanzaremos.
Deseo que tengan una feliz Navidad. (Carlos Casanova Leal)
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