Hallacas para todo el mundo, señores. La cena navideña nos reúne en familia venezolana y debemos mantenernos alrededor de la mesa. Un juguetico para los niños y un kerosene para los viejos. Me gusta eso.

Han pasado cuatro Santos Papas y alguna gentecita eterniza en cargos de elección popular. Son caprichos de insensatos que favorecen lo que dice José Mujica en Uruguay –“…Muchos años en un cargo público ofrecen el caldo para la tiranía y la corrupción…”.  Cosas de viejo, amigos.

Mi sufrir con Tiburones de La Guaira se materializa cada año. Se aguanta estoicamente. Es el cariño por una divisa que representa la cuna de lo mejor de nuestra pelota profesional. -Mamen gallo, repelentes magallineros y cacaraquistas.

Amanecer en Pregonero para asistir a las misas de aguinaldos es una sensación especial. Son las naves de nuestras iglesias las que dan cobijo a tantos feligreses que se cubren del frio matutino y escuchan con fe renovada el santo oficio.

Chris Froome empieza la subida de su vida. Sambutanol es la sustancia maldita. Que se hagan las pruebas pertinentes y se limpie nuestro deporte favorito. Recordemos al catirito aquel de los 7 Tour.

Un pistoleroy un cuchillero se dividieron el mundo en dos toletes. Cada uno tenía dos continentes y se disputaban el quinto en duelo a muerte en el desierto de Gobi. El pistolero sacó velozmente su arma y le metió un plomazo a su rival en el hombro. –Ja,ja,ja. No eras tan rápido, pajarraco, le gritó.. El cuchillero, agarrándose la herida, le dijo: – Mueve la cabeza, amiguito. Cuentan que el sonido de la porra del pistolero al caer al suelo se escuchó hasta en Queniquea. Buej…    

Medicamentos vencidos en un país que sufre una descomunal escasez nos dejan turulecos ante tan desidia. Los eliminaron y quedamos buscando explicación del por qué no se utilizaron a tiempo.  Carreto, eran remedios para curar enfermedades que solo sufren los habitantes de Plutón, me dijo el flaco Iván Salas. ( Carlos Orozco Carrero)