Hogan Vega y Dorli Silva
La moda es una palabra muy usada en el trascurrir de los años. Es una palabra empleada indistintamente para describir la creación de ropa, calzado, accesorios, cosméticos y joyas de diferentes estéticas culturales, su mezcla y combinación en atuendos representan formas distintivas de vestir (estilos y tendencias), como sinónimos de estatus social, autoexpresión y pertenencia grupal en los diferentes contextos de las interacciones sociales, a diferencia, en la academia, se usa para determinar el valor que tiene más frecuencia en una serie de datos tomados, de una muestra basada en una variable numérica o cuantitativa, para visualizar la forma y el comportamiento de los datos que permita identificar valores atípicos fuera de especificaciones, poder realizar comparaciones de resultados de un proceso e identificar áreas de mejora de los procesos. Por tanto, decir que están de moda las TIC’S es una realidad que se puede ver en cualquier actividad que se realiza en la dinámica de vida en cualquier parte del mundo.
Al mismo tiempo, con ese pasar de los años, décadas, siglos, los cambios están a la orden del día y la apertura de mente se ha iniciado, no a la velocidad que se requiere pero se ha iniciado, de ahí que hoy en día hablar de la robótica no es descabellado, el crecimiento poblacional y sus necesidades han desbordado las problemáticas de la existencia humana y sus entornos. Asimismo, se ha vivido la evolución de la calidad de los servicios para cumplir con esas necesidades humanas, y se plantean cada vez paradigmas diferentes basados en ideas, valores, técnicas y procedimientos que las interacciones sociales de la sociedad comparte en un momento determinado; también, en el ámbito académico, los paradigmas son usados como modelos que permiten resolver problemas y avanzar en el conocimiento.
En otras palabras, dependiendo del contexto y la época, se escuchaba hablar, diseño de hecho a la medida, pedido entregado justo a tiempo, atención personalizada, especificaciones de los productos cero defectos, atención al cliente cero quejas; y en la actualidad hasta los niños de preescolar, primaria, básica, media y universitarios hablan de la robótica, como el tema que se encuentra de moda. De modo similar, para el diccionario de la lengua Española (DLE) de la Real Academia Española (RAE) define la moda en su primera acepción como: Uso, modo o costumbre que está en boga durante algún tiempo, o en determinado país. En su segunda acepción, gusto colectivo y cambiante en lo relativo a prendas de vestir y complementos. En su tercera acepción, como conjunto de la vestimenta y los adornos de moda; y en su cuarta acepción, como valor que aparece con mayor frecuencia en un conjunto de datos. Como sinónimos en el mismo diccionario: Uso, usanza, boga, costumbre, hábito, gusto, estilo, tendencia.
De acuerdo con las definiciones de la RAE, hablar de moda es hablar de gusto colectivo, también es hablar de adornos de moda, y es válido decir que la tendencia actual es la robótica educativa, como una herramienta que permite a los estudiantes desarrollar su pensamiento lógico, su creatividad, su capacidad para resolver problemas, aprender a programar y construir robots, lo que contribuye a desarrollar habilidades digitales y de codificación. Por su parte, la robótica es la tecnología con la cual podemos resolver y mejorar calidad de servicio, uso de recursos, mejorar la productividad, adaptar diseños de moda a la realidad actual, contribuir con una mejor calidad de vida, y como consecuencia lograr felicidad y estabilidad emocional en la población.
Por ello se hace necesario entender la robótica como una estrategia que favorece los procesos de enseñanza y aprendizaje como asignatura formal dentro de un currículo con su contenido programático, y de ser el caso como una carrera universitaria con su malla curricular y la infraestructura tecnológica requerida, no es solo un modelo que se implementa por estar a la moda, sino que se enmarca en una pedagogía académica, dentro de los procesos formativos con un pensamiento crítico; es una nueva y buena innovación y alternativa para ampliar aprendizajes, desarrollar conceptos y experimentar teorías ya que vuelve la enseñanza más vivencial.
Teniendo en cuenta lo anterior, la robótica educativa propicia un escenario innovador, versátil y creativo, y su utilización debe ser abordada como puente en los diferentes contextos académicos para favorecer los pilares de las competencias desde el ser, el saber y el saber hacer de los individuos. Indico así mismo, la importancia de la robótica educativa en los contextos académicos y sociales, donde se ha demostrado el impacto que genera en las áreas de investigación y conocimiento, incentivando el interés por el aprendizaje de la ciencia y la tecnología y a su vez contribuyendo en las interacciones sociales de la sociedad y ser así parte del desarrollo económico y social de un país.
En virtud de las competencias de cada uno de los involucrados en el proceso de enseñanza-aprendizaje de la robótica, es necesario establecer una relación entre docentes y estudiantes de apoyo y construcción de saberes desde lo personal y social, dimensionando esto al plano del saber hacer en lo real. Al mismo tiempo, la robótica puede ser un catalizador para el aprendizaje significativo, promoviendo habilidades que son cada vez más valoradas en el mercado laboral. En consecuencia, las organizaciones académicas y las instituciones de todos los niveles educativos de todo el mundo han implementado programas de robótica con resultados positivos, mostrando un aumento en el interés por la metodología STEM en robótica, la misma es un enfoque educativo, que integra la ciencia, la tecnología, la ingeniería, las artes y la matemática, para desarrollar habilidades en los estudiantes y como resultado una mejora en el rendimiento académico general de los estudiantes. Estos programas no solo ayudan a desarrollar habilidades técnicas, sino que también fomentan competencias blandas como la comunicación, la colaboración y la resiliencia.
En este contexto, es crucial explorar cómo la robótica educativa puede integrarse de manera efectiva en los planes de estudio, así como los beneficios que aporta a los estudiantes y a la comunidad educativa en general. La robótica no solo prepara a los estudiantes para carreras en tecnología, sino que también les proporciona habilidades fundamentales para la vida, como la resolución de problemas y el trabajo en equipo. A medida que avanzamos hacia un futuro cada vez más tecnológico, la robótica educativa se posiciona como una herramienta esencial en la formación integral de los estudiantes.
En síntesis, la robótica en la educación no es solo una tendencia pasajera, sino una necesidad que responde a las demandas de un mundo en constante evolución. Al adoptar la robótica como parte del currículo educativo, estamos invirtiendo en el futuro de nuestros estudiantes y preparándolos para enfrentar los desafíos del mañana. La robótica no solo les brinda las herramientas necesarias para triunfar en el ámbito profesional, sino que también les enseña a ser pensadores críticos, innovadores y ciudadanos responsables. En resumen, Bill Gates ve la robótica como una herramienta poderosa para mejorar la eficiencia y la calidad de vida, pero también reconoce la necesidad de abordar los retos que conlleva su adopción.