El exalcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, publicó a través de la red social Twitter un comunicado en el que expresó su posición sobre los resultados de las elecciones regionales del próximo 15 de octubre y afirmó que la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) «está mal conducida».
Dijo que «es tiempo de cumplirle a los venezolanos que lo han dado todo por seguir nuestras líneas», citó Globovisión.
«Pero la gente está indignada y tiene razón de estarlo, no culpemos a la ciudadanía de las equivocaciones de una dirección política que está del tumbó al tambo, esa es la verdad aunque duela».
A continuación el comunicado íntegro:
Una gigantesca mayoría es reducida por un régimen agónico porque la directiva le da prelación a proyectos personales en detrimento del gran objetivo que es cambiar de régimen urgentemente, la gente está dolida porque piensa que mientras los jóvenes heroicos estaban derramando su sangre sobre el asfalto de las calles, algunos estaban pintando sus pancartas para ir a unas elecciones, que de antemano se sabía que serían tan fraudulentas como la Constituyente. No se trata de maltratarnos unos a otros, pero sí de rectificar, de tener una clara estrategia, está es la hora, o cambiamos de conducción o seremos responsables de que este régimen siga destruyendo a Venezuela.
Es tiempo de darle a la Venezuela decente un nuevo CNE, es tiempo de cumplirle a los venezolanos que lo han dado todo por seguir nuestras líneas. Pero la gente está indignada y tiene razón de estarlo, no culpemos a la ciudadanía de las equivocaciones de una dirección política que está del tumbó al tambo, esa es la verdad aunque duela.
Ofrecemos la plataforma de SOYVENEZUELA para ayudar a reencontrarnos con la ciudadanía que hoy más que nunca necesita de orientación, que necesita creer en líderes que no la defrauden, que no se sientan utilizados, que nos respeten y vean que estamos definidos en la estrategia y no actuando como los camaleones de la política.
Esa plataforma debe ser tan amplía y grande como la esperanza de una ciudadanía que solo espera que tengamos la grandeza de entender que una verdadera unidad debe ser más grande que nuestras particulares ambiciones.
La comunidad internacional merece una explicación de nuestro comportamiento, porque aunque esos líderes del mundo no lo digan públicamente, sienten que la dirección política es más chiquita que la dimensión de la crisis que estamos llamados a superar.
Mitzy Capriles de Ledezma, dio a conocer un mensaje de su esposo, Antonio Ledezma, preso político del régimen venezolano, en el que fija posición de lo ocurrido el pasado domingo, Antonio habla con la autoridad moral que lo asiste de haber sido siempre un factor unitario, puente entre todos los factores, aún en las circunstancias más difíciles.
Para Antonio «es indispensable producir un cambio urgente en la conducción de la oposición, sin estrategia y Unidad al servicio de la salida de este régimen que reclama Venezuela, seguiremos convirtiendo en derrotas las grandes victorias que el consecuente ciudadano venezolano ha puesto al servicio de una lucha titánica que se ha venido dando, con la resistencia más digna que se pueda conocer en nuestro hemisferio.
No es hora de repartir culpas, ni de hacer leña del árbol caído, menos de agachar la cabeza, es tiempo de demostrarle al mundo de que estamos hechos los venezolanos, de la fuerza espiritual y de las férreas convicciones que nos asisten, para superar este mal momento que contrasta con la potente fortaleza moral del pueblo venezolano que no termina ni le es fácil comprender cómo se puede desperdiciar y malbaratar un capital político de la manera más inexplicable.
Los cabecillas del gobierno han logrado, en parte, lo que se propusieron desde que engatusaron a dirigentes de la oposición en la insólita parodia de un diálogo que solo ha servido para dividirnos como eje unitario, para pulverizar hasta la tarjeta de la manita, para ganar tiempo Maduro y su régimen y para confundir a la comunidad internacional, que aún no asimila los giros incoherentes que ha dado la dirigencia saltando de la calle, donde proclamaban la aplicación del artículo 350 de la Constitución, a meterse de cabeza en un proceso tan fraudulento como la manera como se cocinó la Asamblea Constituyente. Eso no tiene perdón de Dios ni del pueblo.
Es hora de luchar de verdad por los intereses del pueblo, para librarlo de un régimen agónico, que no tiene fuerzas, más allá de los abusos que sigue cometiendo para sostenerse en el poder, desde donde lo que hace es infringirle daños al país y a su gente.
Propongo que la Asamblea Nacional lo antes posible vuelva a sesionar, a que cumpla la agenda aprobada por los ciudadanos el pasado 16 de julio, a que se convoquen elecciones generales, no para elegir alcaldes o concejales, sino para elegir un nuevo presidente ya. Para eso debe ser cualquier diálogo o negociación, para garantizar el rescate de la república y de sus instituciones, para dotar a Venezuela de un nuevo gobierno con un plan mínimo que es factible aplicar con la seguridad de que se lograrán los cambios que todos ambicionamos. Deben ser nuevos negociadores y mediadores, eso es indispensable, de lo contrario crecerá la decepción y la desconfianza razonable de millones de venezolanos.