“Ante la increíble y dramática realidad que vivimos y la inviabilidad de un país, como se presenta el nuestro, convocamos y exhortamos con la mayor urgencia a los venezolanos a participar activamente en las acciones necesarias, con el respaldo de la comunidad internacional, para que se cumpla el mandato del pueblo expresado en la consulta popular del 16 de Julio de 2017, que ordenó nombrar un gobierno de unión nacional para restituir el orden constitucional”, así lo expresó mediante un manifiesto dirigido a los ciudadanos y Estados democráticos del mundo el Movimiento Independiente Democrático (MID).

En el escrito, enviado a Redacción, el Movimiento argumentó el llamado en vista de que “sufrimos la desgracia de un país arruinado, endeudado y preterido, por culpa de las siniestras políticas de una banda narco-terrorista internacional que cumple un rol antinacional signado por el Foro de Sao Paulo, que se tomó con Hugo Chávez el gobierno en 1998 y sigue con Maduro y sus compinches acechando la democracia de las naciones de América”.

Enumeran, como segunda causa, “la represión criminal de una fuerza policial y militar formada por malhechores, en sintonía con quienes “administran” justicia, que acalla la protesta legítima y encierra, tortura y asesina disidentes sin fórmula de juicio”.

También condenan en el escrito “la creciente postración de sectores de la sociedad, extenuados por la penuria y ganados por la desesperanza, cuya voluntad de expresión y de conducta se encuentra amordazada por la extorsión del llamado Carnet de la Patria”.

Refuta “la destrucción de todo el aparato productivo estatal y privado y la ocupación colonial de muchas zonas productoras de riqueza”.

Aunado a eso, condena el MID “la triste y conmovedora migración que la necesidad obliga a millones de jóvenes, en su mayoría profesionales”, así como “la confusión y la rabia que paralizan y consumen a las mayorías democráticas internas y externas, por las disparatadas manifestaciones y ejecutorias de alguna dirigencia partidista opositora, que de hecho las convierte en sostén de la dictadura y comprometen seriamente la validez de los partidos políticos, cuando no son tiempos de perder, deshojando la margarita de unas elecciones que hoy convoca fraudulentamente la Asamblea Nacional Constituyente cubana, en su pretensión de mantenerse en el poder, sin ninguna oportunidad para la oposición y con todas las cartas marcadas”. (LZ)