En el marco de la celebración del Día del Empleado Público, el 4 de septiembre, Vidal Agelvis, secretario general del Sindicato de Empleados Públicos del Ejecutivo regional, aseguró que los trabajadores de la Administración pública no tienen nada que celebrar, pues su situación económica y laboral se ha deteriorado vertiginosamente.
Aseguró que mientras el Gobierno nacional mantiene un discurso mentiroso sobre unas supuestas mejoras, la verdad es que “los empleados públicos se encuentran prácticamente en la indigencia”.
“Queremos un salario justo, que esté por el orden de unos seiscientos dólares mensuales, para paliar la crisis que estamos viviendo, además de seguridad social», indicó Agelvis.
—Actualmente – continuó- la situación del trabajador es realmente denigrante, pues ya su salario ni siquiera forma parte del ingreso del grupo familiar.
Asimismo, el representante sindical recordó que las contrataciones colectivas no se han vuelto a discutir, “desde hace veintidós años; con la llegada de la revolución ha desmejorado la situación de los trabajadores en todos los aspectos».
“Exhortamos al Ejecutivo Nacional a cumplir con los trabajadores, respetando las convenciones colectivas de trabajo y la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela”, enfatizó.
—Exigimos – continuó Agelvis- respeto a los funcionarios públicos y a la dignidad humana. “Los trabajadores venezolanos son los únicos en el mundo que pagan para ir a trabajar, porque el sueldo alcanza escasamente para comprar una bolsa de harina Pan y un kilo de arroz».
“Los trabajadores del estado Táchira, a través del Sindicato de Empleados Públicos, nos declaramos en emergencia ante tanto atropello por parte del Gobierno nacional, pues además de que el salario establecido es el más bajo de América Latina, juega permanentemente con la necesidad de quienes, a pesar de las adversidades, hacen lo posible por reivindicar la función pública”.