El Partido Comunista de Venezuela (PCV) no participará en las elecciones legislativas y regionales previstas para el 27 de abril. La decisión la tomaron, tras las deliberaciones realizadas en el marco del XV Pleno del Comité Central realizado el pasado 15 de febrero.
A través de un comunicado, el PCV recalcó que «el 10 de enero Nicolás Maduro tomó posesión de un cargo para presidir un gobierno de facto; producto de una «conspiración» de los poderes públicos del país». Además, resaltó que el CNE no presentó el soporte de la data desagregada por mesas y centros para validar el triunfo oficialista en los comicios del 28 de julio de 2024.
De igual forma, advierte que quienes están en el poder han iniciado una nueva etapa de represión en el país «sin precedentes» con la detención de jóvenes y trabajadores, que hoy son víctimas de violaciones a sus derechos más fundamentales; al igual que esta etapa signó una persecución férrea contra sectores políticos que buscan un cambio en Venezuela.
En ese sentido, el partido puso sobre la mesa los casos del hoy detenido excandidato presidencial Enrique Márquez, así como los dirigentes políticos María Alejandra Díaz y Juan Barreto, quienes han sido objeto de persecución por parte del Estado. Además, recordó que el mismo PCV fue presa de estas acciones al quitarle la tarjeta electoral y entregarla a personas afines al oficialismo.
La tolda del «Gallo Rojo» ratificó su llamado «a las fuerzas revolucionarias, populares y genuinamente democráticas, independientemente de la táctica adoptada en esta coyuntura electoral» para establecer una alianza que permita la recuperación de los derechos políticos, económicos y sociales, al igual que para confrontar a la oposición, que asegura que puede solucionar la crisis.