Basta un anuncio de aumentos de sueldos para que los productos de primera necesidad aceleren más el paso y amplíen una diferencia, que al parecer en Venezuela ningún salario puede acortar.
Freddy Omar Durán
En el pasado, el mayor deseo de un trabajador en Venezuela era que el sueldo le alcanzara al menos para hacerse de una prenda de vestir o de un gusto personal; con el actual, que al menos se pueda llevar un kilito de carne para la casa.
Un kilo de carne actualmente ronda los 75 mil bolívares, de segunda, y 80 mil la de primera. Teniendo en cuenta que el salario integral, con el cual se defiende la gran mayoría de venezolanos, llega a 300 mil bolívares, y que en una familia promedio se tendría que consumir al menos un kilo a la semana, vemos que con solo ese producto se consumiría gran parte de ese ingreso.
Y si pensamos en el pollo –cuyo valor ronda las mismas cifras- o en el cartón de huevos, en alrededor de los 90 mil bolívares, las alternativas no son muchas, y ni pensar en el pescado o el cerdo, o la charcutería. Las entrañas vacunas se ofrecen a un precio inferior, pero no en todos lados; pero igual poco se compadecen con una billetera en sequía.
Los carniceros alegan que la subida se debe a la oferta en canal, a la que agregan cierto margen de ganancia, porque de lo contrario solo irían a pérdida, y se verían en la obligación de cerrar sus negocios. Se pudo constatar que los abastecimientos contaban con una buena existencia del producto en sus vitrinas; así como también se vieronpocos clientes solicitándolo; no obstante, el tachirense como sea trata de que sus refrigeradores no permanezcan vacíos.
En declaraciones dadas a medios de comunicación nacionales, Fedenagas aseveró que en Venezuela se producen unos 4 kilos per cápita, cuando deberían ser 25 kilos, y para el año entrante el rebaño se verá reducido, lo que incidirá aún más en el aumento del precio de la carne.
Mientras en el mes de septiembre el precio rondaba los 55 mil bolívares, estabilizándose por un buen tiempo, en octubre agarró impulso, hasta en diciembre tocar su aumento el 50 por ciento. Nada indica que para 2020 las perspectivas sean más halagüeñas, y lo más probable es que el incremento en seis meses cruce el 100 por ciento. Siendo uno de los ingredientes fundamentales de las hallacas, es de temer que para este diciembre el principal plato en la mesa navideña de los venezolanos se ausente de muchos hogares.