Alfredo Aldana es un destacado músico, cantante y compositor con más de 35 años de trayectoria artística. Invaluable es su labor como investigador del bandolín tachirense. Ha dedicado su vida a preservar y enriquecer la tradición musical de nuestra tierra.
“Este instrumento, de 14 cuerdas, más que citadino, es rural. Todavía está inmerso en los campos que se mantuvo con su afinación. Con la llegada de la mandolina italiana, desplazó al bandolín, porque la mandolina tiene un cierto parecido a la mandolina en su sonido. La mandolina tiene ocho cuerdas y el bandolín 14, por eso la primera, por las cuerdas se hizo más práctica y en los campos mantuvieron la afinación”, narró Aldana, en su casa de habitación, en La Grita.
Quienes han estudiado su trayectoria, describen que sus interpretaciones musicales van cargadas de mucho sentimiento, demostrando su virtuosismo en la ejecución desde lo más autóctono, como lo es el bandolín tachirense, hasta pasar por la guitarra, piano y la profundidad de sus composiciones. Cada nota cuenta una historia, es parte de la cultura andina venezolana.
Durante 35 años, su pasión y entrega se percibe en su música, también en su compromiso por mantener viva la herencia cultural de este instrumento que representa el corazón de muchas tradiciones locales.
Declaró que La Grita, municipio Jáuregui, su hogar, se ha convertido en un estudio de grabación, instrumentos y recuerdos, que refleja su esencia creativa, el artista, quien es una inspiración para nuevas generaciones.
Para muchos, es él un pilar en la preservación y difusión de la identidad cultural tachirense y venezolana que refuerzan el calificativo de Atenas del Táchira a la ciudad de La Grita. (RC/JLG)