Norma Pérez
En tiempos de cuarentena los estudiantes de los diferentes centros educativos del municipio Junín prosiguen su aprendizaje en la modalidad a distancia, debido a la imposibilidad de acudir a los planteles.
Por medio del plan nacional “Cada Familia una Escuela”, alumnos desde el preescolar hasta el bachillerato, cumplen una serie de tareas desde sus casas, bajo la supervisión del personal docente, para así avanzar durante el asueto obligado.
De acuerdo a lo establecido, los profesores deben planificar y desarrollar actividades para que las ejecuten los estudiantes, con el apoyo del grupo familiar y de las diferentes redes sociales, aún cuando en muchos casos puede ser una limitante, debido a los continuos cortes de energía eléctrica y caída de la red telefónica.
Por esta razón, hay que adecuar los horarios y aprovechar cuando se cuente con los recursos y servicios necesarios. Así se benefician cientos de niños y jóvenes, que no dejan de estudiar y aprender.
Formación continua
La unidad educativa “Colegio Los Andes”, pertenece al circuito Nro 2, cuyo supervisor es Juan Miguel López; mientras que el enlace municipal está a cargo de Breyfa Montoya, quien creó el Centro Local de Investigación y Formación Permanente de la Zona Educativa Táchira, Grupo CLIFPD Junín.
Los alumnos de esta institución, forman parte del plan nacional y desde la suspensión de actividades, se incorporaron de lleno a su programación.
Al respecto, el Coordinador de Formación Docente del plantel, Ender Delgado, encargado de supervisar las estrategias para el desarrollo de las clases en todas las áreas, explicó que se pretende dar continuidad al proceso formativo, por medio de estrategias didácticas, con el respaldo de los padres como orientadores.
La supervisión la hacen los docentes de aula y para los estudiantes de primaria, se implementaron herramientas de comunicación e información de fácil acceso como grupos de whatsapp y facebook, donde se realiza el registro e información de la actuación de los niños en la realización de las actividades desarrolladas en el hogar.
En lo que concierne a los alumnos, de educación media general, se incorporó el aula virtual como herramienta de estudio y trabajo; allí se desarrollan los contenidos por medio de foros, discusiones, videos y tutoriales. Asimismo, la plataforma permite realizar técnicas evaluativas entre las que figuran mapas conceptuales, mentales y la descarga de archivos de otros formatos. Por su parte, los docentes pueden evaluar y sistematizar los resultados.
Interacción y evaluación
Para constatar la realización de las asignaciones, en lo que respecta a primaria, se hace a través de un reporte fotográfico del estudiante, que evidencia su desempeño; todo esto se archiva en un portafolio. A las maestras les corresponde llevar un registro de las asignaciones, así como de las limitaciones, fortalezas, oportunidades e incidencias de cada actividad y un control de asistencia; que se envía a al coordinador pedagógico para establecer un reporte circuital.
En media general, las actividades se suben a la plataforma virtual, con fecha de inicio y culminación. Los docentes, a través de instrumentos de evaluación, califican las asignaciones igual que si fueran de carácter presencial. Finalmente, se elabora un reporte general de actividades diarias para el supervisor.
Es importante destacar que el aula virtual permite a profesores y estudiantes, el acceso al desarrollo de contenidos; también visualizar a los estudiantes conectados y resguardar sus datos o archivos, para evitar un plagio. Se puede acceder desde un computador, celulares o tablets.
Permite el intercambio de mensajes y el respaldo de archivos, entre muchas otras ventajas. Ante cualquier impedimento de acceso a la plataforma, la unidad educativa “Colegio Los Andes”, cuenta con un equipo técnico especializado que resuelve estos problemas para una óptima labor de sus actores.
Un aspecto primordial a considerar en esta experiencia virtual, es que los estudiantes posean los equipos necesarios para acceder a la platafoma. Al respecto, el profesor Delgado manifestó que en un trabajo colectivo con directivos, personal docente y administrativo, se constató que el 90% de la matrícula cuenta con equipos y conexión para utilizar adecuadamente el aula virtual. “No obstante, un 10 por ciento no tiene acceso por diversos motivos: Localización, que les impide tener servicio de internet; o no poseen equipos”.
Agregó que ante estas circunstancias, se fijaron estrategias para que este porcentaje pueda cumplir con sus asignaciones, con actividades en físico, es decir manuscritas y en otros casos por correo electrónico o redes sociales.
De esta manera, y con un gran equipo de trabajo, respaldado de por padres y representantes, los niños y jóvenes se mantienen desde sus casas en la disposición de aprender y asumir una nueva experiencia que les tocó vivir y que de alguna manera les prepara para enfrentar a futuro cualquier problema y resolverlo. Es convertir una circunstancia adversa en una oportunidad.