Regional

Avenidas de Rubio convertidas en basurero

8 de diciembre de 2021

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Algunas personas limpian, a la espera de una colaboración.

Norma Pérez

En un basurero se encuentran convertidas las avenidas de Rubio, capital del municipio Junín, ya que las islas divisorias se utilizan para dejar los desechos.

A plena luz del día, se observan personas acarreando bolsas que se acumulan en las intersecciones o en los cruces; tal es el caso de la avenida Los Leones, frente a la sede de Hidrosuroeste, donde el problema se torna más grave por la cantidad de desperdicios desperdigados en la vía.

Esta situación también se presenta a lo largo de la avenida Rotaria y aun cuando en uno de los puntos había un señor tratando de limpiar, con la esperanza que le dieran una colaboración, su intención solo resuelve momentáneamente.

Allí se afecta directamente al personal y a los alumnos de la unidad educativa “Estado Mérida”, ya que están expuestos a la contaminación que esto origina.

Anteriormente, personas inescrupulosas colgaban las bolsas llenas de residuos en la reja de la institución, por lo que directivos de la institución debieron tomar acciones para que dejaran de hacerlo.

En la avenida Manuel Pulido Méndez, muy cerca del hospital “Padre Justo”, el panorama es similar.

Beatriz Quintero, vecina del sector, dio a conocer que a diario, en horas de la mañana, debe desplazarse por la avenida Los Leones y ve a la gente dejando toda clase de objetos, además de las bolsas, que al caer se rompen y su contenido se riega por el suelo.

“Las personas botan la basura en las avenidas porque saben que cuando pasa el camión del aseo urbano las recoge, pero esto no es a diario, por lo que hay días en que la cantidad es tan grande que ocupa, además de la isla, parte de la calle, lo que no solo es desagradable para quienes debemos circular por ahí, sino que puede originar un accidente”.

Agregó que en vista de que el servicio de recolección por parte del aseo urbano es irregular, se genera el bote en lugares inadecuados: “pero debe haber mayor conciencia por parte de los habitantes, ya que arrojar las bolsas en las avenidas no es la solución; al contrario, es peor, porque esto produce malos olores, proliferación de insectos y roedores, así como contaminación ambiental, que nos perjudica a todos”.

Una circunstancia lamentable, donde hay que hacer un llamado al sentido común, pues por deshacerse de los desechos que se originan en los hogares y establecimientos, se crea un problema de mayores dimensiones, que atenta contra el bienestar común. /Norma Pérez.