Freddy Omar Durán

El mal estado de la Cuesta Las Brujas, municipio Cárdenas, deja en una situación muy incierta a los vecinos de Barrancas parte alta, al borde de la total incomunicación.

Este es un problema que se suma a la larga lista que padece una comunidad afectada en su gran totalidad por deslizamientos en el terreno de su asentamiento; pero este en especial conllevaría una virtual incomunicación.

Uno de los canales de la Cuesta Las Brujas, vía entre Barrancas parte baja y parte alta, y de ahí al municipio San Cristóbal al llegar a la avenida Antonio José de Sucre, está “flotando en el aire”, mientras que su par no cuenta con las mejores condiciones para la vialidad.

Los vecinos de Barrancas parte alta no escondieron sus preocupaciones, pues de colapsar esa pendiente, solo les quedaría como alternativas ir hacia el Jardín Metropolitano o por el Mercado Mayorista de Táriba, nada confiables por el mal estado de las mismas y el largo rodeo que implicaría dirigirse a las poblaciones vecinas.

Vecinos del sector consultados afirmaron que en varias ocasiones han estudiado realizar protestas para llamar la atención a un problema que para ellos reviste gran gravedad, y que les resulta increíble que sabiendo las autoridades regionales y nacionales lo neurálgico de ese paso, hasta los momentos no se hayan abocado a las soluciones.

La preocupación se ha acrecentado al escuchar los reclamos de las unidades de transporte que por allí transitan, que han amenazado en no subir pasajeros, pues no están dispuestos a que sus vehículos corran más riesgos.

De tales peligros ya han conocido varios motorizados que han perdido el control y terminado aparatosamente sobre el pavimento, aunque hasta los momentos no se han reportado accidentes de gravedad.

Por una de las grietas de la Cuesta Las Brujas brota una luz que indica preocupantemente que un trozo del pavimento apenas tiene donde sostenerse, e indica que si una carga muy pesada le pasa por encima, sencillamente se va a partir. Los conductores, para evitar ese canal se van hacia el otro con la precaución de no encontrarse con los vehículos que vienen en sentido contrario. En medio se levanta un matorral, indicio del total descuido en que ha caído la vía. (FOD)