En la  Biblioteca Pública Central “Leonardo Ruiz Pineda” se dictó un Taller de Crecimiento Personal, dirigido a los trabajadores de esta institución, dependiente de la  Red de Bibliotecas Públicas de la Dirección  de Cultura del  Táchira, con el objeto de preparar a sus funcionarios y crear un cambio de actitud, basado en principios y valores en la prestación de sus servicios, para de esa manera lograr una visión integral de sí mismos.

Mediante una nota de prensa se informó que fue dictado por Alfonso Peña, encargado del departamento de Capacitación de la Corporación Tachirense de Turismo, Cotatur, actividad organizada por  la Unidad de Talento  Humano del ente rector de los servicios bibliotecarios de la  entidad,  que dirige Nancy Lagos. Se contó además con  la asistencia de trabajadores de la Biblioteca “Antonio Mora”, de la Unidad Vecinal.

Daniella Sánchez, coordinadora del ente rector de los servicios bibliotecarios de la  entidad, les dio la bienvenida a los  bibliotecarios, personal administrativo y obrero, destacando el interés en seguir recibiendo talleres  de este tipo, pues de esta manera  se mejorará el desempeño personal, además de que seguramente serán mejores personas.

Por su parte Nancy Lagos, encargada  del departamento de Talento Humano  de la Red, expresó  que en lo que va de la administración de la gobernadora  Laydi Gómez, “nuestros bibliotecarios han  recibido dos inducciones que estuvieron a  cargo de personal de la Dirección de Política, en el sentido de mejorar los conocimientos necesarios en la prestación del servicio a la comunidad”.

El taller se inició con una breve  introducción  del ponente, quien  expresó que en la casa materna  la persona recibe valores y conocimientos, pero  se continúan adquiriendo experiencias en el sitio de trabajo,  donde uno pasa la mayor parte de su vida,  interactuando diariamente  con sus compañeros de labores y un público que  necesita y espera  una buena atención.

Durante los últimos veinte años, las bibliotecas han tenido mucha importancia, cada vez hay más conciencia de su valor social y de la necesidad de su desarrollo, para un crecimiento integral del ciudadano. Por esta razón, “nuestros bibliotecarios están obligados, no solo a ser prestadores de un servicio, sino asesores de  cualquier tipo de información que requieran los usuarios y lectores, en forma amena, cortés y sobre todo que se tenga  amor por  la profesión y sentido de pertenencia con la institución para la cual se trabaja. (JLG)