Como cierre con broche de oro al mes más religioso del Táchira, las actividades espirituales se trasladan de la zona norte a la zona sur, específicamente a El Corozo, al sur de San Cristóbal, donde las réplicas del Santo Cristo de La Grita y la Virgen de la Consolación tendrán un encuentro para presidir el XII Campamento Juvenil “Jesucristo Salva”, organizado por la Diócesis de San Cristóbal.
La invitación la extendieron los presbíteros Luis Ramiro Rojas y José Eliseo Rojas, pertenecientes a la parroquia Señor de los Milagros, de La Cuesta del Trapiche, quienes convocan a todos los devotos para que expresen la solidez de su fe de manera multitudinaria.
Las actividades ya se han desarrollado, desde el viernes, cuando se ha procedido al arribo, en horas del mediodía, a la Iglesia Señor de los Milagros de la réplica del Santo Cristo de La Grita. Pero el hecho capital ocurrirá este martes 27, en horas del mediodía, cuando Madre e Hijo se reencuentren, para proceder a ir en procesión por la Troncal 5, rumbo a San Josecito, donde se espera reciban la bienvenida de un pueblo mancomunado por una sola fe.
El domingo 25, la presencia del Santo Cristo será el motivo principal de una amplia programación eucarística, pautada para las siete de la mañana, las diez de la mañana y las cinco y media de la tarde. Luego, el día martes, a hombros de sacerdotes y jóvenes piadosos, hará su entrada triunfal a El Corozo.
El Campamento Juvenil “Jesucristo Alto Pana” ya lleva 12 ediciones y en cada una de ellas se ha respondido al eterno llamado del Hijo de Dios, a que sean los más jóvenes los encargados de evangelizar y encarnar en vida la Palabra de Dios, esta vez teniendo por escenario una zona de grandeså necesidades materiales y espirituales, ávida de redención y de bendición divina.
La actividad, que se extenderá hasta la próxima semana, contempla eventos pastorales, espirituales, culturales y deportivos.
Como gran clausura, luego de una peregrinación de las dos imágenes que durará alrededor de dos días, los dos iconos del fervor tachirense serán elevados en la iglesia San José Obrero de San Josecito, el primero de septiembre.
Se espera que la feligresía tachirense de la zona sur sea parte del avivamiento del Espíritu Santo, en la confluencia a esta actividad y que no se pierda la oportunidad de ungirse en la contemplación de dos símbolos fundamentales, no solo de la religiosidad propia del tachirense, sino de su identidad cultural, a sabiendas de que muchos creyentes no han tenido la oportunidad de desplazarse hacia Táriba o La Grita en estos días.