El pasado 24 de mayo, la oposición que lidera Juan Guaidó puso en el aire la señal de Telesur Libre, originada desde sus estudios ubicados en la ciudad de Miami, pero tres horas más tarde fue bloqueado el portal por el Gobierno, sacándolo de la línea, por lo que no pudo ser visto en Venezuela.
Este es el segundo proyecto en esa dirección puesto por la oposición, pues el 17 de abril de 2020 también se anunció la reorganización de Telesur, a cargo de los periodistas Leopoldo Castillo y Larissa Patiño, que no logró cristalizarse.
Para “su segundo debut” se ha llamado al concurso de Eduardo Sapene, en la presidencia, y Roberto Marrero en la dirección general, que ya lanzaron la plataforma y está dirigida a Centroamérica, el Caribe y Sudamérica, con corresponsales en Cuba y Nicaragua.
La señal de Telesur Libre sale a través de internet y de las redes sociales, “para difundir noticias e informaciones que permitan a los ciudadanos tener acceso a los acontecimientos de manera veraz y confiable”, enfatizaron en su comunicado fundacional.
El primer intento de contar con un medio televisivo fue en 2016, para controlar la emisión de ANTV, encargada al periodista Miguel Ángel Rodríguez, pero por falta de recursos tampoco se llevó a cabo.
Ahora, se supone que, con los capitales recibidos del exterior, se ha hecho posible coronar la idea con Telesur Libre, que ya está enviando una serie de noticias que esperan sean bien recibidas en el resto de naciones en donde entra su mensaje de manera normal.
Adelantándose a este anuncio, el Gobierno ya ha prometido que pondrá a disposición de la señal abierta, y por lo tanto de manera gratuita, 43 televisoras, en donde están todas las plantas del Estado y de países como Cuba, Bolivia y Nicaragua, que entrarían en la trilla en cualquier momento.
Victor Matos