Hidrosuroeste sustituyó la tubería de agua potable que surte a Zorca por manguera, pero la Alcaldía de Cárdenas no se ha ocupado del problema causado por las aguas servidas. Vecinos del sector y zonas aledañas temen que pueda ocurrir un deslizamiento con consecuencias fatales.
Bleima Márquez
Uno de los problemas más angustiantes para los habitantes del sector Alta Vista de Tucapé, parte alta, municipio Cárdenas, fue solucionado por Hidrosuroeste. Se trata de la sustitución de un tubo de 4 pulgadas, que llevaba agua potable a Zorca, por una manguera.
Pero la amenaza en la zona continúa porque el sistema de cloacas colapsó hace tres años y ha generado una serie de daños en la comunidad. Sus habitantes viven bajo el riesgo de un derrumbe que podría provocar una gran tragedia para este sector y otros cercanos como Zorca, El Mirador y Pie de Cuesta. “Las consecuencias podrían ser fatales”, advierten los lugareños.
De acuerdo con los vecinos de la zona, son varios los problemas originados por el agua servida que circula libremente por los terrenos. Destacaron que hay constantes deslizamientos de terrenos, y como consecuencia las calles y regresivas se han hundido.
Esta situación está destrozando las casas y los sistemas de cloacas. El colector principal de aguas servidas también está severamente deteriorado. Los afectados ya no saben qué hacer para que la alcaldesa de la jurisdicción, Marta Gallo, escuche sus súplicas.
“Hemos ido varias veces a la alcaldía, pero nos dejan esperando mucho tiempo y a la final salimos sin respuesta satisfactoria”, sostuvieron, y recalcaron que mientras visitan a las instancias competentes para contar lo que sucede en la comunidad, el problema avanza.
Crónica de una muerte anunciada
Insisten los lugareños en que viven bajo un gran riesgo. Ellos vienen avisando a las autoridades municipales las consecuencias fatales que podría desencadenar si el terrero cede por completo; sin embargo, las semanas y los días siguen pasando sin respuesta alguna: “No hay señales de esperanza todavía, esperamos que no resulte una crónica de una muerte anunciada”.
Las aguas servidas continúan circulando libremente y filtrándose por los terrenos. Los lugareños aseveran que ya no duermen por la angustia y el miedo de que ocurra una tragedia en cualquier instante: “Si llegase a ocurrir un deslizamiento de tierra, Zorca podría quedar cubierta por el sedimento”.
Además de la alta probabilidad de un desastre por el estado del sistema de cloacas, otra dificultad se presenta: la contaminación ambiental; y con esta, alteración del entorno, se registra la llegada de enfermedades respiratorias, del estómago y de la piel.
«El colapso del sistema de cloacas hace que las aguas servidas corran libremente por los terrenos aledaños, generando un gran foco de contaminación ambiental que puede provocar enfermedades a los habitantes», recalcaron.
Reiteraron la advertencia de que esa situación también afecta a las comunidades de Zorca, Pie de Cuesta, El Mirador, entre otras poblaciones cercanas: «Ya se están presentando deslizamientos de terrenos y daños en las casas y calles de esas comunidades».