Freddy Omar Durán

Si por los lados de la vía que conecta a Las Lomas a la avenida Libertador la situación de la vialidad es preocupante, un poco más allá, por la vecina carretera en Colinas de Carabobo, no hay mucha diferencia.

Es un largo rosario de huecos, cuya joya de la corona vendría siendo la intersección con La Machirí, que a su vez tiene su propia historia que contar sobre el desastre vial.

Estando apenas en pleno proceso de recuperación la vialidad en Las Lomas, para muchos conductores tomar Colinas de Carabobo resulta una de las pocas opciones para una llegada expedita hasta la avenida Libertador, que podría quedar descartada si los huecos y baches se agudizan.

A pesar de la cercanía de entes estadales, o incluso la residencia de ilustres tachirenses en el sector, nada de eso ha redundado para que se vea mejoría en la vialidad. Incluso surgieron promesas de quienes teniendo la “palanca” podrían brindar soluciones; pero no se han cumplido.

 ¿Culpa de una naciente o de una cloaca? Lo cierto es que las aguas de incierto origen van abriendo grietas por el pavimento de cemento, e incluso alimentando la vegetación que por ellas brota, y da le da una “bonita” tonalidad verdosa.

—La carga de vehículos, algunos de carga pesada, que pasaban por Las Lomas, incluso la misma Machirí la hemos tenido que soportar. Una vez quisimos hacer una protesta para llamar la atención sobre la situación pero preferimos evitar esto, aunque sabemos que de un momento a otro esta vía colapsa. O sea, se afecta con tanto tránsito una vía ya de por sí en muy malas condiciones— afirmó un vecino de la zona.

Se trata de una carretera que sufre deterioro por un descuido de años pero también que se hunde, y eso aumenta más la peligrosidad para quienes transitan el lugar.

Por la conexión con la Machirí, por donde debe pasar las unidades de la línea Santa Teresa, la proliferación de huecos la comanda una auténtica piscina cuyo color verdoso ya no solo anuncia una emergencia de orden vial sino de salubridad, llevando la peor parte cualquier motociclista que caiga en ese cráter.

Los vecinos han intentado aplicar paños tibios para frenar tanto el bote de aguas cloacales, la naciente de manera que se desvíen o se depositen en otro lugar, pero esos esfuerzos improvisados han resultado infructuosos. (FOD)