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22 de noviembre de 2024
Daniel Pabón
Son las 12:00 del mediodía y en el Santuario Nuestra Señora de La Candelaria, en Caracas, las campanas suenan al ritmo del ‘Salve Regina’. Este templo de estilo neoclásico, construido en 1708, está cerrando puertas por apenas unas horas. Omaira Fernández se apresura a salir junto a Irma Valderrey. Han cumplido guardia este día de la semana, una vez más. El círculo azul que resalta en sus franelas blancas habla de ellas: son centinelas del Dr. José Gregorio Hernández Cisneros.
Más temprano, a las 11:00 de la mañana, habían empezado a rezar el rosario. Así todos los días, de lunes a viernes. Siempre con gente que espontáneamente se sienta y responde las avemarías. Una intención no falta en cada rezo: la pronta canonización del beato que este jueves 26 de octubre, por tercera vez, celebra su propia fiesta litúrgica en el seno de la Iglesia venezolana. Ahora mismo el Vaticano estudia un presunto segundo milagro atribuido a su intercesión.
El rosario es una de las formas que los centinelas encuentran para incentivar la devoción a José Gregorio, cuyos restos mortales están resguardados en su altar de la nave derecha del santuario. Hacer limpieza de ese altar y mantener las flores que los devotos depositan es otra de las labores del equipo.
“Nos motiva prestar el servicio a los más afligidos, a quienes vienen aquí con sus pesares espirituales”, dice Omaira, quien comparte el gentilicio trujillano con el médico de los pobres. Aunque las memorias litúrgicas de otros beatos se celebran el día que partieron al cielo, en el caso de Hernández coincide con la fecha de su nacimiento en Isnotú, el 26 de octubre de 1864. Hace 159 años.
Irma comparte el sentimiento. Esas guardias rotativas que cumple por las mañanas, como una más entre los 15 centinelas del equipo, las entiende como un rato para sentir verdadera paz interior. “Es muy bonito”, asiente, al comentar que también se dedican a la vigilia, a responder dudas de los devotos sobre el beato y a participar en las horas santas de esa tradicional parroquia del centro de Caracas.
La fe es el vínculo que los une. Así le sucedió a Yulissa Aldana, una de las más recientes centinelas quien escuchó el llamado del párroco-rector del santuario, Gerardino Barracchini, a colaborar con la causa. “Un día vine a traerle flores a la Virgen, me invitaron y me quedé”, cuenta esta joven, devota de José Gregorio desde que tiene memoria.
Este jueves, fiesta litúrgica del beato, las misas en La Candelaria comienzan a las 8:00 de la mañana. Este año la imagen del médico andino saldrá en procesión a las 10:00 de la mañana desde la iglesia Divina Pastora, en La Pastora, hasta el santuario de La Candelaria. La llamada “Ruta del Beato” es una iniciativa de la Vicepostulación de la Causa, rumbo a la canonización, que busca dar a conocer mucho más sobre la vida y obra de Hernández en Caracas, donde sirvió y falleció el 29 de junio de 1919. El cardenal Baltazar Porras presidirá la misa central a las 5:00 de la tarde y, al terminar, una nueva procesión por el centro.
La fiesta del primer beato laico de Venezuela suele desbordar Caracas: en los distintos santuarios de las diócesis y arquidiócesis del país también celebrarán oficios religiosos. En San Cristóbal el Santuario Diocesano de José Gregorio Hernández queda en la capilla de San Lucas, al lado del Hospital del Seguro Social, en Santa Teresa. Allí el obispo Mario Moronta oficiará misa este jueves a las 5:00 de la tarde
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