Regional
Esquivar un hueco es caer en tres en la vía Santa Teresa-La Machirí
24 de julio de 2019
Conducir en forma de ‘S’, para algunos conductores, es una manera de asegurar que su vehículo no caiga en uno de las docenas de huecos y zanjas que desde hace tres años, según vecinos, no dejan de multiplicarse en la carretera que une a Santa Teresa con la vía principal de La Machirí, donde esquivar un cráter es caer en tres.
El tramo de al menos 40 metros, frente al Mercado Popular Santa Teresa, presenta un grave desgaste de la capa asfáltica, obligando a quienes transitan por la vía a reducir la velocidad, maniobrar con el volante y hasta detenerse, sin importar la hora, para no caer precipitadamente en las zanjas o en el lado descubierto de una alcantarilla.
El motorizado Jesús Guerrero se detiene al inicio del tramo, al que todos temen, pues conoce muy bien la carretera, transita por allí todos los días.
Declaró que las condiciones viales “obligan a los conductores a detenerse”, y andar con cautela, ya que en el lugar reina la inseguridad.
Es decir, las personas que van hacia la autopista o vienen deben sortear dos grandes obstáculos, que no solo colocan en peligro sus bienes materiales, sino también su propia vida, al transitar por una vía donde reina la inseguridad y el mal estado de la calle.
Inseguridad vs huecos
Todos los días, quienes se movilizan de Santa Teresa a La Machirí se enfrentan valientemente a dos temores: la delincuencia y los huecos.
Los conductores no saben a quién temerle más, si a uno u otro; por eso, mejor andan con prudencia por la zona y no se confían.
Una de las principales características de esta vía es la soledad. Pocas son las viviendas que se consiguen en el lugar. Dos conjuntos residenciales encerrados con paredes de bloque y concreto, para prevenir el paso de los dueños de lo ajeno, dan a entender que hay que andar con sumo cuidado.
Además, al panorama se suma la ausencia de una casilla policial que resguarde la integridad física y los bienes materiales de sus habitantes, y de quienes a diario se desplazan obligados por el sitio para poder llegar a su destino.
Y por supuesto, al pasar el tramo no hay quién no tema a los daños que pudieran causar a su vehículo -de 2 o 4 ruedas- las “troneras” viales. “Los tripoides, los amortiguadores, las estoperas y los cauchos”, son algunas de las partes más vulnerables a los huecos, mencionó el conductor Pedro Zafra.
La Machirí no se escapa
Dos años, según estima Palermo Gómez, es el tiempo que tiene una zanja que abarca más de la mitad de la carretera en el sector La Machirí. Los carros, después de subir la inclinada vía y superar una curva, se detienen para hacer cola con el fin de atravesar los daños que ha sufrido el pavimento.
Igualmente, Gómez teme en este tramo a la inseguridad, ya que gran parte de la vía tiene espacios con zonas boscosas que sirven de escondite a los dueños de lo ajeno; no dejarse sorprender por un hueco al frenar el carro, es convertirse en blanco fácil de la delincuencia.
Situación no muy distinta se observa más adelante, daños semejantes en la capa asfáltica obligan a los conductores a meter freno y crochet, ante docenas de huecos, que esta vez no solo cubren la mitad del ancho de la calle sino su totalidad.
Además, al ser una vía desprovista de aceras, los vecinos deben caminar a orillas de la misma, por donde transitan vehículos de carga pesada que se dirigen a la Zona Industrial de Paramillo.
A la espera de reparación vial
La Gobernación del estado Táchira y la Alcaldía del municipio San Cristóbal informaron, el jueves 18 de julio, que iniciarían reparaciones del tramo vial del sector Los Kioscos- Hospital del Seguro Social el lunes 22 de julio. Más de 100 millones de bolívares fueron aprobados.
A menos de 2 kilómetros de distancia, una vecina del sector Santa Teresa, apoyada en una de las ventanas del segundo piso de su casa, ve movilizarse la cola de carros que transitan lentamente por el sector. Ella, al igual que sus vecinos, desea que la vía adyacente a su residencia también sea reparada. Yuliana Ruiz