Este domingo, en San Cristóbal, falleció don Julio César Hidalgo Bazo, un hombre al que siempre se le identificó en el Táchira con el progreso y el desarrollo del área agropecuaria.
Con Hidalgo Bazo parte un trujillano de nacimiento pero un tachirense de corazón dedicado al trabajo productivo en el área agropecuaria y con visión de que el campo en este estado podía estar a la altura de los grandes países.
Hidalgo Bazo ocupó la presidencia de Asogata, en donde trabajó sin descanso en pro de su pasión: la ganadería y el campo.
En el año 2018, cuando en Asogata se le rindió un homenaje como uno de sus expresidentes, se destacó que siempre mantuvo el apoyo gremial y además se identificó por su significativo apoyo al mejoramiento genético de la ganadería venezolana, a través del Centro de Inseminación La Honda.
Los bovinos de su ganadería siempre le merecieron reconocimientos, tanto a nivel nacional como internacional, además de otros emprendimientos, como el implante de embriones, fábrica de implementos agropecuarios y la Planta de Nitrógeno, única en el sector privado en Venezuela.
Igualmente, Hidalgo también cultivó su rol empresarial en el área de las concesionarias.
Julio Hidalgo fue llamado a los brazos del Señor, pero su huella permanecerá, no solo en su familia, sino en todos quienes lo conocieron y en todos los que su trabajo tocó, aun sin conocerlo.
Desde Diario La Nación, nos unimos al luto que su fallecimiento produce y enviamos palabras de condolencias a su esposa, Indalecia Rivas de Hidalgo, hijos, familiares y amigos.